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El candidato presidencial del Partido Revolucionario Moderno y fuerzas aliadas, Luis Abinader, asumió el compromiso, mediante la firma de un pacto con líderes del movimiento sindical, de aplicar un aumento general de salario para los empleados públicos. Dijo que el alza salarial sería en una escala establecida en función de los
cargos y categorías de los puestos, consignando en el caso de los militares y policías un sueldo mínimo nacional que no será inferior al equivalente de los 500 dólares.
Igualmente propone la revisión de todas las pensiones en el sector para adecuarlas al costo de la vida y a la necesidad de protección del Estado que tienen las personas envejecientes y con algún grado de incapacidad que motive su pensión o jubilación.
El acuerdo también plantea promover en el marco de un diálogo tripartito una reforma sustancial a la Ley 87-01 del Sistema Nacional de la Seguridad Social, adecuándola a la realidad actual, para que se fortalezcan las prestaciones de servicios, se aumente la cobertura de las enfermedades catastróficas, se aumente la cobertura de los medicamentos ambulatorios, mejoren las prestaciones de pensiones y jubilaciones y se aumente la cobertura de la población asegurada.
Igualmente se establece el compromiso de preservar el Instituto Dominicano de Seguros Sociales, fortalecer su institucionalidad y mantener su carácter tripartito.
Abinader suscribió el documento junto a los dirigentes Pedro Julio Alcántara, Rafael Caraballo, Alberto Santana, José de Los Santos, Agustín Vargas Saillant y sor Amantina, en representación de las diversas corrientes sindicales del PRM en el sector de la construcción (Fenticommc), en la Central Nacional de Trabajadores Dominicanos (CNTD), la Central Nacional de la Unidad Sindical (CNUS) y de los gremios de enfermería.
Se compromete a respaldar el sistema de salud pública del país “asegurando una inversión gradual hasta un 5% del PIB a fin de garantizar la dotación de un modelo de salud que permita desarrollar la salud preventiva y la curativa para toda la población”.
Se plantea promover “una política de generación de empleos dignos en el sector público”.
