El aspirante presidencial del Partido Revolucionario Moderno (PRM) y el expresidente de la República, Hipólito Mejía, favorecen que se combata la corrupción y ofrecieron apoyo a quienes están al frente de sometimientos a la justicia a los acusados de esos actos.

Luis Abinader fue enfático al señalar que apoya todo lo que se haga para terminar con la corrupción y dio un espaldarazo a la Procuraduría en los expedientes contra corrupción.

Con respecto a los golpes, empujones e insultos propinados por seguidores del expresidente Leonel Fernández contra periodistas que cubrían una conferencia que ofreció el exmandatario el miércoles y a activistas que protestaban, Mejía acusó a Fernández de ser un pichón de dictador.

Ese es un mal indicador, afirmó y agregó, “ahora algunos hijos de Machepa se han llegado a creer que son gente”.

En ese mismo sentido, Abinader consideró un acto propio de paleros no superado, el maltrato a la prensa en el acto que tenía Fernández y lo condenó.

Espera que acciones de ese tipo no se vuelvan a repetirdr, porque constituyen un atentado al ejercicio de la libertad de expresión y al derecho que tienen los ciudadanos a protestar contra lo que no les parece bien.

Con respecto a la sentencia de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos, tanto Mejía como Abinader anunciaron que esta semana habrá una rueda de prensa para dar a conocer la posición del partido al respecto.

Sin embargo, Mejía dijo que no es bueno para el país las posiciones de arrogancia, pues a su juicio es necesario respetar al que piensa diferente.

“Hoy día somos el hazme reir a nivel internacional, debemos aprender a disentir”, manifestó Mejía, quien contestó diferentes preguntas a los periodistas al participar en un acto de juramentación de nuevos integrantes del PRM.