Aboga por trato flexible en créditos a naciones

Aboga por trato flexible en créditos a naciones

MONTERREY, México.— El presidente Hipólito Mejía apeló ayer al “entendimiento y la flexibilización” de las instituciones financieras internacionales para que puedan responder de manera oportuna a los requerimientos y desafíos que enfrentan las naciones en desarrollo frente a una economía globalizada.

Mejía advirtió también que la comunidad mundial no puede permitir que las dificultades económicas interfieran con los planes de inversión social en las naciones pobres, porque es ésta la que determina el desarrollo humano, la tranquilidad y la paz. “Sin esto, dijo Mejía, no habrá progreso económico ni gobernabilidad política”.

Mejía, en una de las sesiones de la Cumbre Extraordinaria de las Américas clausurada en la tarde de ayer en esta ciudad, se refirió también a los problemas del terrorismo, los conflictos políticos en diferentes partes del mundo y la pobreza.

Planteó que éstos constituyen temas impostergables que requieren del compromiso y la voluntad de las naciones del hemisferio y de sus líderes.

Llamó, además, a seguir combatiendo la corrupción y la impunidad, tanto pública como privada, con acciones que permitan no sólo al gobierno, sino a toda la sociedad una rendición de cuentas que contribuya a la transparencia administrativa, al fortalecimiento de las instituciones y al estado de derecho.

Se quejó de que cambios fundamentales impulsados por los gobiernos para la construcción de “sociedades más justas”, frecuentemente chocan “con la incomprensión y el rechazo” de sectores tradicionales que se resisten a perder los privilegios que han disfrutado a través de la historia.

“Desgraciadamente, dijo también el presidente Mejía, las metas que se imponen nuestros gobiernos se ven frecuentemente incumplidas debido a la existencia de factores adversos, tanto en el plano nacional como internacional”.

El mandatario destacó que en la actualidad su gobierno está impulsando cambios institucionales que además de maximizar la eficiencia económica, tienen el propósito de promover la justicia social y aliviar la pobreza.

Mejía, cuya política económica ha sido criticada por sectores empresariales y lideres políticos de oposición, dijo que la democracia por sí misma, sin aportar solución a los problemas cotidianos de los pueblos, es insuficiente para garantizar una gobernabilidad política estable y duradera.

Agregó, además, que son insuficientes las cifras del desarrollo económico, si éstas no se traducen en bienestar para las personas y los grupos excluidos.

Destacó que pese a los importantes progresos registrados en las economías de muchos de los países de América Latina, en estos han seguido teniente vigencia las precarias condiciones de vida y las desigualdades sociales permanecen como fenómenos generalizados.

Planteó que en la región se precisa, además de estabilidad macroeconómica, políticas públicas activas que contribuyan a mejorar la distribución del ingreso, la educación, la salud, la alimentación, la vivienda y la igualdad de género.

También, la sostenibilidad ambiental y el ingreso familiar, factores que consideró como “fundamentales para superar las condiciones de pobreza en que viven amplios segmentos “de nuestros pueblos”.

En el plano internacional, dijo, la liberalización del comercio de bienes y servicios, el movimiento de capitales y la cooperación técnica y financiera, son temas cruciales que requieren una justa y equilibrada solución para que las metas sociales y económicas de nuestras naciones puedan ser alcanzadas”.

En este orden, dijo que su gobierno tiene una gran confianza en que los procesos de integración regional y la globalización de las economías “ayudarán a elevar el bienestar de la población siempre y cuando se tenga en cuenta las particularidades de cada país y se respete el principio de que el mejor acuerdo es aquel en todos ganan”.

“Tenemos que evitar que la obligación de evitar que la apertura comercial y la globalización sean fenómenos que profundicen la pobreza y la inequidad social”, dijo.

Insistió en que la comunidad internacional no puede permitir que las dificultades económicas interfieran con los planes de inversión social en las naciones pobres, porque es esta inversión la que determina el desarrollo humano de nuestros pueblos.

El mandatario retornó ayer a su país.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas