Los 11 testigos civiles que han comparecido en el juicio de fondo que se sigue a los presuntos integrantes de la banda de John Percival Matos, no han identificado al mayor del ejército Elvin Rodgers Rodríquez como integrante de la organización criminal.

Así lo indicó la abogada Sonia Marlene Guerrero Medina, titular de la defensa del mayor Rodger Rodríguez, quien reiteró que la Fiscalía del Distrito Nacional en las pruebas materiales que ha presentado y en los 11 testimonios de civiles que estaban alrededor del fenecido Percival Matos y de la banda, no han podido tener ningún testigo que señale ni directa, ni indirectamente al mayor Elvin Rodgers Rodríguez.

“Creemos que el tribunal podrá tener las bases suficientes para poder descargarlo de los hechos que le imputa la Fiscalía del Distrito Nacional”, resaltó.

John Emilio Percival Matos. Fuente externa.

Además comentó que restan de la acusación, 20 testigos de los cuales 18 de ellos son militares que participaron en los levantamientos de la escena del crimen, cuatro cajeros del Banco Popular y el testimonio de la señora Ana Iris Linares.

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La audiencia de fondo de ayer, fue recesada para hoy.

Se recuerda que durante la primera audiencia del juicio de fondo el principal imputado de formar parte de la banda y del homicidio de un vigilante, Peter Félix Paulino, precisó que el mayor Rodgers no tiene ninguna vinculación a la banda, y que no entiende porque la Fiscalía mantiene su acusación contra el militar.

“Brayan alega en el texto que fue presionado por el Ministerio Publico para inculpar al mayor Rodgers”, precisó su abogado.

En este proceso figuran como imputados Brayan Peter Félix Paulino (Mariachi), Francisco Alberto de Jesús Caraballo, Elvin Rodgers Rodríguez, Reyvi David Corporán Adames (Culebra o el Mecánico) y Javier de Jesús Fernández Perelló, los cuales son acusados por el ministerio público de participar en asaltos a diferentes entidades bancarias y camiones de transporte de valores.

Durante sus acciones delictivas, le habrían provocado la muerte y graves lesiones a sus vigilantes, en el Distrito Nacional y la provincia Santo Domingo.

Se le imputan los delitos de asociación de malhechores, lavado de activos, porte y tenencia ilegal de armas de fuego, robo agravado, asesinato y tentativa de asesinato.