Un abogado responsabilizó hoy de cualquier atentado en su contra que afecte su integridad físcia, a un fiscal que labora en las oficinas de la Procuraduría ubicada en la plaza Ghapre, Santo Domingo Este, quien presuntamente ordenó la libertad de varios hombres que lo agredieron sin ni siquiera agotar el mínimo procedimiento legal.

En una visita realizada a la redacción del periódico Hoy, el doctor Alfonso Matos denunció que el fiscal Wilson Zabala, de Ghapre, en una actitud alegadamente sospechosa pidió a la Policía Nacional que soltara a varios hombres que el martes pasado lo agredieron a puñetazos, palos y lo amenazaron con machetes, sin revisar al menos la querella que había interpuesto en contra de ellos.

Matos narró que todo se originó cuando acudió a la fiscalía de Villa Mella, José Elías Tavarez para presentar una querella por la agresión de varios hombres invasores de un terreno , ubicado en el sector La Javilla, de Sabana Perdida, contra quienes había obtenido una orden de desalojo por parte del abogado del Estado, lo que ocurrió de manera pacífica el sábado pasado.

Explicó que una vez en la fiscalía, el magistrado Tavarez supuestamente le manifestó que en esa dependencia no se podía interponer querella de ese tipo, sino que debía ir a Ghapre para realizar el proceso, versión que aunque le pareció no correcta realizó. Citó que este mismo fiscal, diez meses atrás, presuntamente había mostrado la misma actitud cuando se le presentó la querrella en contra de estos mismos hombres.

Expuso que luego de permanecer desde las 8:00 de la mañana hasta las 3:00 de la tarde en esas oficinas del Ministerio Público en Ghapre , en el sector Invivienda, finalmente llegaron los policías con los detenidos, situación aprovechada por el fiscal Zabala para no revisar la querella en actor civil que le había entregado y tomar la decisión de liberarlo.

Documentos presentado por el abogado a los fisclaes Zabala y Tavarez

Se quejó de que pese a que la querella está elaborada de acuerdo al Código Procesal Penal, alegadamente el fiscal Zabana no la leyó ni se dio cuenta de las pruebas que presentaba en contra de los acusados, entre las cuales está un certificado del médico legista en el que se establece las consecuencias de los golpes que recibió.

Reseñó que, incluso, uno de los abogados de los supuestos agresores iba tomar la palabra, siendo interrumpido inmediatamente por el fiscal, quien le dijo que no tenía que decir nada.

«Ante esa situación, yo quiero dejar sentado que cualquier situación que a mí me ocurra, cualquier agresión, de donde provenga, el único culpable, y lo dejo saber así a todos los que me conocen, el único responsable es ese señor que se denomina magistrado Wilson Zabala», enfatizó.

Puntualizó que su situación es muy grave, de amenaza, debido a que los que estaban detenidos le manifestaron que ya le conocía, y que donde quiera que lo vieran lo perseguirían. «Este señor cometió esa ligereza; nos e qué relación de contubernio podría tener, pero no hay que hacer un post grado en Francia para determinar que hay algo oscuro».