El futbolista cubano Marcel Hernández acusado desde 2018 de cometer delitos sexuales contra una menor de edad.
Un tribunal penal de Costa Rica absolvió este lunes al futbolista cubano Marcel Hernández acusado desde 2018 de cometer delitos sexuales contra una menor de edad.
El Tribunal Penal de la ciudad de Cartago (centro) emitió este lunes el fallo en el que declaró por unanimidad que a Hernández “se le absuelve de toda pena y responsabilidad por 4 delitos de violación y 2 delitos de relaciones sexuales en perjuicio de una menor de edad». Los jueces también ordenaron el levantamiento de las medidas cautelares que pesan contra el futbolista como lo es el impedimento de salida del país.
Durante el juicio
Durante el juicio, la Fiscalía pidió el pasado viernes 4 años de prisión contra Hernández por dos delitos de relación impropia con una menor de edad. Retiró los cargos que había presentado por cuatro delitos de violación. La fiscal del caso, Carolina Martínez, expuso ese día las conclusiones de la Fiscalía en el juicio, mientras que la defensa del acusado solicitó la absolutoria de todos los cargos.
Los hechos habrían ocurrido en agosto del 2018, cuando la víctima tenía 16 años de edad y el acusado 29. Durante el juicio, la defensa insistió en que nunca hubo una violación sexual. Divulgó los mensajes de texto que intercambiaron el jugador y la menor de edad, y presentó a los jueces el análisis de una perito.
Hernández, jugador del Cartaginés local, fue detenido temporalmente el 4 de octubre del 2018 luego de que la ofendida interpusiera una denuncia en su contra, el día anterior. El día de la detención las autoridades allanaron la casa del futbolista en busca de evidencia relacionada al caso. En agosto de 2020 un juzgado dictó un sobreseimiento en favor del futbolista. Pero la Fiscalía presentó una apelación y consiguió que el caso fuera elevado a juicio.
Desde que fue acusado, el futbolista ha cumplido medidas cautelares como presentarse a firmar una vez al mes a un juzgado. También el impedimento de salida del país, mantener domicilio fijo y la prohibición de acercarse o comunicarse con la víctima y testigos. Según la defensa, este proceso le ha traído afectaciones al jugador tanto en su vida personal como futbolística.