Madrid.  EFE.  Menos de tres semanas después de haber condenado e inhabilitado a Baltasar Garzón por ordenar escuchas a los cabecillas de una red de corrupción, la Justicia española absolvió ayer al juez en el proceso que se le siguió por querer investigar los crímenes del franquismo.  

En su sentencia emitida ayer, el Tribunal Supremo concluye, por seis votos frente a uno, que la decisión de Garzón de declararse competente, en octubre de 2008, para investigar los crímenes del franquismo fue “errónea”, pero no prevaricadora, por lo que le declara no culpable.  

Pero pese a su absolución en esta causa, Garzón no podrá volver a ejercer como juez, ya que el pasado día 20 el Consejo General del Poder Judicial español le expulsó de la carrera judicial, tras haber sido condenado el 9 de febrero a once años de inhabilitación en el juicio que se le siguió por ordenar escuchas a los cabecillas de una red de corrupción llamada “Gurtel». El juicio por la causa del franquismo había quedado visto para sentencia el pasado día 8, y en él sólo dos sindicatos ultraderechistas ejercieron la acusación, mientras que la Fiscalía solicitó la absolución de Garzón.

El juez más conocido de España -por su lucha contra la banda terrorista ETA, entre otras causas- y famoso en el exterior por perseguir a los represores de las dictaduras de Chile y Argentina, estuvo arropado en el proceso y en los meses previos por numerosas organizaciones de derechos humanos, plataformas de apoyo y sectores de la izquierda que ven en los juicios contra Garzón una persecución política. Garzón, como juez de instrucción en la Audiencia Nacional, se había declarado competente en 2008 para investigar las denuncias de 22 asociaciones de familiares de desaparecidos durante la Guerra Civil y el franquismo y autorizó la apertura de 19 fosas en toda España.   En reacción a la sentencia de ayer, el portavoz de la plataforma “Solidarios con Garzón”, Luis García, aseguró que la decisión   fue     una persecución contra él.