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La Academia de Ciencias manifestó ayer su rechazo a varios artículos de la reforma constitucional, relacionados con el aborto, equidad de género, la familia y las instituciones religiosas.
En un documento entregado a la Comisión de Género de la Cámara de Diputados, la entidad califica como errónea y atrasada las definiciones que sobre el derecho a la vida y el concepto de familia, se dan en los artículos 30 y 44, respectivamente, del texto propuesto por el Poder Ejecutivo para la nueva Constitución.
El presidente de la Academia, doctor Nelson Moreno Ceballos, afirmó que de aprobarse la absurda definición de que la vida se inicia al momento de la gestación, se consagraría en el país la imposibilidad de una necesaria ley de aborto terapéutico.
En un país como el nuestro, donde ocurren 100 mil abortos anuales de acuerdo con Unicef, que producen el 40% de la mortalidad materna, mantener esa situación, además de inhumana, viola los derechos humanos y reproductivos de la mujer, expresó Moreno Ceballos
En torno a la familia, dijo que tampoco aprueban la definición que da el texto constitucional, afirma que desde el punto de vista sicológico es incorrecto y atrasado, toda vez que el 54% de la familia dominicana es monoparental, es decir, están constituidas por por madres o padre solteros y sus hijos.
Agregó que lo más grave es que los efectos legales de la familia están limitados al matrimonio, y deja fuera a las concubinas y sus hijos, lo cual es una realidad cultural en República Dominicana.
Moreno Ceballos declaró que con esa exclusión se conculcan los derechos de sucesión y protección de mujeres e hijos procreados en ese tipo de unión, lo que consideró una actitud injusta e inhumana que no puede ser apoyada.
Respecto a la propuesta de ley que regula la relación del Estado y las instituciones religiosas, dijo que la academia está opuesta al proyecto, porque establece un fundamentalismo cristiano excluyente de las otras religiones que se practican en el país. Estamos de acuerdo con una ley que regule la libertad de cultos universal, sin restricciones de ninguna práctica religiosa.
