Acarreados

Acarreados

El domingo, y todavía ayer lunes, no se hablaba de otra cosa en las redes sociales, donde se convirtió en viral un video de un acto de graduación de Quisqueya Aprende Contigo donde un grupo de personas que se encontraban presentes en el acto, y vistiendo uniformes de graduandos,   declararon a un canal de televisión que  estaban ahí “para respaldar” a los que se graduaban pero que no habían sido alfabetizados;  otros, en cambio,  declararon que no sabían  porqué se encontraban en el lugar. ¿Cuántos más estaban  en la misma condición, es decir disfrazados de beneficiarios de  ese plan? ¿Han sido así todas las graduaciones? Eso es difícil saberlo, pero dadas las circunstancias y puesta en evidencia la irregularidad  (para decir lo menos), está uno en su derecho a pensar lo peor. Y a juzgar por los comentarios  de la mayoría de los que han visto el video  es evidente que pocos se han sorprendido ante la ocurrencia, demasiado familiarizados ya con las mañoserías de nuestros políticos, mucho más en tiempos de campaña electoral, donde pareciera que se vale todo. Las explicaciones del equipo de campaña del alcalde Roberto Salcedo  no han convencido, pues hablar de que la oposición tiene un plan para desacreditar Quisqueya Aprende Contigo  es   una burla a nuestra inteligencia. Porque aquí todo el mundo sabe que en estos tiempos se acarrea a la gente, como si se tratara de ganado, para utilizarla  en marchas, concentraciones   y caravanas, por lo que es probable que  algún ocioso  creyera que  no estaba de mas hacer un poco de bulto en ese acto. Por eso creo que el gobierno hizo bien al ordenar una investigación sobre las 2,500 personas que recibieron sus certificados en el acto del pasado sábado, y lo mismo puede decirse de la  suspensión de  la entrega de certificados   hasta después del 15 de mayo “para evitar que el programa pueda verse afectado por el clima político electoral”. Una iniciativa tan importante  no debe ser contaminada por la politiquería  barata.

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