La explosión de unos cables soterrados de alta tensión ocasionó ayer un apagón que hizo colapsar el sistema eléctrico del Aeropuerto Las Américas, dejando inhabilitada la terminal sur. Cientos de pasajeros quedaron varados por horas, ya que limitó la salida de vuelos a uno de los dos puentes de embarque.
El accidente, que ocurrió próximo a las 12:30 del mediodía, dejó a cientos de pasajeros varados por horas, ya que limitó la salida de vuelos a uno de los dos puentes de embarque.
La directora de Comunicaciones del Aeropuerto Siglo XX1 (Aerodom), Yolanda Mañán, explicó que la situación ocasionó el retraso de toda la programación de salidas desde el momento de la avería, aunque no especificó la cantidad de vuelos afectados. Precisó que no hubo cancelaciones.
Para las llegadas de vuelos el retraso fue menor, porque la revisión se inició de forma manual, hasta que se restableció el servicio digital alrededor de la 1:30 p.m. En principio de la avería, el personal tuvo que usar focos.
Brigadas de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) y de la Empresa Distribuidora del Este (Ede-Este) instalaban anoche dos plantas generadoras de emergencia para iluminar las áreas afectadas.
Sin embargo, Mañán informó que será hoy cuando continuarán trabajando para corregir la avería en los cables de una sub estación.
El personal de las empresas eléctricas explicó que el sistema de emergencia de la terminal aérea, que es un cliente no regulado de AES Dominicana, no pudo entrar en operación tras el apagón, lo que afectó las actividades del aeropuerto.
Dijeron que la CDEEE y Ede-Este dispusieron de la presencia de sus técnicos por razones de seguridad, pese a que éste no es cliente de ninguna distribuidora.
Ante la situación, los pasajeros se manifestaban indignados por las largas horas de espera y se quejaban de que ni las líneas áreas ni las autoridades les informaban qué ocurría.
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¿Sabotaje?
Cuando ocurrió el accidente, que dejó a oscuras la terminal aérea, se difundió el rumor de que se trataba de un sabotaje. La situación obligó a que el jefe de las Fuerzas Armadas, teniente general Pedro Rafael Peña Antonio, se trasladara al aeropuerto para reunirse con los jefes de seguridad de la terminal para iniciar las investigaciones. Luego, se determinó que se trató de una explosión de cables soterrados.