Los detalles en metal aportan atractivo a la estancia gracias a su brillantez y su aspecto “vintage”.
Colocar elementos de metal le dará un toque de glamour a su esapcio, y por qué no, de modernidad.
Además, el metal es bien preciado dentro de la decoración por sus propiedades de reflexión de la luz (lo que aporta luminosidad de una estancia), por sus tonos neutros, que combinan con casi todo, y por la personalidad que imprimen a los ambientes.
La variedad y tonos es inmensa; los más adecuados para decoración son los tonos cobre, el color oro, los metales corrugados para agregar texturas o el color plateado, cromado y de acero inoxidable.
Estos metales por lo general se integran perfectamente a cualquier tipo de decoración cuando se colocan de manera sutil, de modo que usted no tendrá que cambiar su decoración al incluir uno que otro objeto en este material, sino que la enriquecerá.
Papel y tela. En la actualidad usted puede conseguir laminados en papel en tonos metálicos para sus paredes; otra idea es colocar cojines en estos tonos -ya sea dorado, plata o bronce-. Los acentos en estos tonos le darán un toque diferente a su estancia.
Metales fusionados. Aunque por lo general, se estila que se coloque un solo tono de metal en los accesorios de decoración, usted tiene la opción de mezclar a su gusto, considerando que hoy en día las propuestas más atrevidas se basan en las mezclas o fusiones.