POR DIONISIO SOLDEVILA
El dominicano Tony Peña está feliz y contento por la designación como coach de primera base de los Yanquis de Nueva York. Como resultado de su contratación, Peña ahora renunciará del puesto de dirigente del equipo nacional de la República Dominicana para el Clásico Mundial de Béisbol.

“Me siento bien, gracias a Dios llegamos a un acuerdo. La gente tiene que entender que quiero seguir adelante en mi carrera en las Grandes Ligas y para eso tengo que estar dentro, no fuera”, dijo Peña en conversación telefónica con redactores de HOY.

Peña explicó que sus labores con los Yanquis no serán exclusivamente de coach de primera, sino que también estará laborando como instructor de receptores.

“También voy a estar entrenando directamente con Jorge Posada”, avanzó Peña, quien tiene dos renuncias en menos de un año.

 Peña abandonó el puesto de capataz de los Reales de Kansas City el pasado mes de mayo aunque se mantuvo en el puesto como asesor especial.

Ahora, renuncia del equipo dominicano menos de dos meses después de ser anunciado como el responsable de las riendas del equipo.

Dijo que fue contratado por un año y que el gerente general Brian Cashman quiere tenerlo en Tampa, base de operaciones de los Yanquis durante el invierno y gran parte del año, para iniciar sus trabajos pronto.

“Todavía no conozco a George Steinbrenner pero sé que vamos a tener una buena relación porque mi trabajo es dar el máximo de mi mismo como sé hacerlo”, dijo Peña.

Peña se une a Larry Bowa y a Lee Mazzilli como ex dirigentes nombrados en puestos de coaches en lo que va del invierno después de la renuncia de Mel Stottlemyre y el paso a dirigir en las menores del venezolano Luis Sojo.

Tony Peña fue designado Dirigente del Año de la Liga Americana en la temporada del 2003, pero ya para el 2005 la organización de los Reales se había desmejorado demasiado y Peña no aguantó la cantidad de derrotas sufridas en poco tiempo.