La Asociación de Bancos Comerciales de la República Dominicana (ABA) reveló que actualmente de los 543 tipos de tarjetas vigentes con que cuenta el sistema bancario, apenas al 1.1 por ciento de estos se le aplica el 104 por ciento de interés anual, que es la tasa máxima.

“Existen tarjetas de crédito que cobran el 15% de interés anual, y otras que van desde un 18%, 20% y hasta el 36% de interés, aplicándose esta última tasa al 20.5% de los tipos de tarjetas vigentes”, sostuvo.

La ABA explicó que los bancos múltiples cobran unos 30 tipos de tasas de interés en las tarjetas de crédito, lo que demuestra la amplia variedad de tasas que ofrecen estas entidades a sus tarjetahabientes.

La ABA sostiene que para el banco comercial determinar la tasa de interés  que le será cobrada al financiamiento de las tarjetas de créditos toma en cuenta: las características de la tarjeta, en cuanto a los beneficios colaterales que se derivan de su uso (por ejemplo, descuentos, premios, abonos a la cuenta, etc.), el segmento a quien va dirigido el plástico, y las características del cliente, es decir, el nivel de riesgo que corre el banco al financiar a un tarjetahabiente.

Las declaraciones de la ABA surgen a raíz informaciones vertidas en los medios de comunicación con relación a las tasas de interés que cobran los bancos por el financiamiento de las tarjetas de crédito, en base a datos  publicados por la Superintendencia de Bancos en su portal de Internet.

Según datos ofrecidos en ese portal,  el banco que cobra una tasa más alta por financiamiento a la tarjeta de crédito estándar aplica una tasa de  104.4 por ciento y el que cobra una tasa más baja aplica una tasa de  48 por ciento.

Esto arroja una diferencia, en ese caso, de  56.4 puntos porcentuales.

Los datos publicados por la Superintendencia de Bancos en su portal también incluyen los cobros que hacen los bancos comerciales por otros conceptos asociados a las tarjetas, como cargos por mora, emisión, reemplazo de plástico, seguro, etcétera.

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Lo que ponderan

Para aplicar las tasas de interés se toman en cuenta las características de la tarjeta en cuanto a los beneficios colaterales que se derivan de su uso, el segmento a quien va dirigido el plástico y las características del cliente, es decir, el nivel de riesgo que corre el banco al financiar a un tarjetahabiente.