BOSTON — La actriz de “Full House” (“Tres por tres”) Lori Loughlin y su esposo, el diseñador de modas Mossimo Giannulli, aceptaron declararse culpables en el caso de sobornos a universidades y cumplir una pena de prisión, según documentos de la corte presentados el jueves.
Loughlin, de 55 años, acordó purgar dos meses de prisión y Giannulli, de 56, cinco meses, bajo un acuerdo que debe ser aprobado un juez. Tienen previsto declararse culpables el viernes por videoconferencia.
La famosa pareja iba a ir a juicio en octubre acusada de pagar 500.000 dólares en sobornos para que sus dos hijas ingresaran a la Universidad del Sur de California como miembros del equipo de remo, aun cuando ninguna practicaba ese deporte. Ayudaron a crear perfiles de deportistas ficticios para sus hijas enviándole al cerebro de la operación, el asesor de admisiones Rick Singer, fotografías de las adolescentes posando en máquinas de remo, dijeron las autoridades.
Los abogados de Loughlin y Giannulli habían argumentado que la pareja creyó que los pagos eran “donaciones legítimas” que irían directamente a la USC como regalo o apoyarían la fundación benéfica de Singer. También acusaron a los fiscales de esconder evidencia crucial que podía demostrar la inocencia de la pareja porque eso socavaría su caso.
A principios de este mes, el juez rechazó su solicitud de que desestimara el caso alegando conducta inapropiada por parte de los agentes del FBI que investigaban el fraude.
La pareja acordó declararse culpable de asociación ilícita para cometer fraude postal en un acuerdo con la fiscalía presentado en la corte federal de Boston. Los fiscales acordaron desestimar los cargos de lavado de dinero y soborno a programas federales que se habían agregado luego de la presentación del caso.
Según lo acordado, Loughlin también pagará una multa de 150.000 dólares y realizará 100 horas de servicio comunitario. Y Giannulli pagará una multa de 250.000 dólares y realizará 250 horas de labor comunitaria.
“Bajo los acuerdos presentados hoy, estos acusados cumplirán penas de prisión considerando sus respectivos papeles en una conspiración para corromper el proceso de admisiones universitarias y en consecuencia con las sentencias previas en este caso”, dijo el fiscal federal Andrew Lelling. “Seguiremos buscando responsabilizar a quienes socavan la integridad de las admisiones universitarias”.
Un abogado de la pareja declinó hacer declaraciones.
Loughlin y Giannulli estuvieron entre las 50 personas arrestadas el año pasado en el caso apodado “Operation Varsity Blues” que sacudió al mundo de la educación superior. Son los 23er y 24to padres que se declaran culpables en el caso.