El juez del Primer Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional, Román Berroa Hiciano, entró ayer en la etapa más oscura del juicio contra los 27 imputados del caso que envuelve la matanza de siete colombianos en Paya y tráfico de droga. Empezó a escuchar las revelaciones de tortura policial para que confesaran que hacen algunos de los acusados y a sofocar los avatares de los abogados que tratan de sacar de circulación al querellante Orin Clinton Gómez Haford, en su condición de único sobreviviente de la matanza.
Berroa Hiciano aplazó el juicio para el jueves 26 y fijó un nuevo calendario a las próximas tres audiencias, para los días 4, 10 y 17 de diciembre. Ese día se contempla concluir la fase preliminar, que decidirá si los incriminados deberán enfrentar un juicio de fondo o son liberados de los hechos del 4 de agosto de 2008, cuando además de los crímenes, se establece que hubo un tráfico de 1,200 kilos de droga y una cantidad de dinero no cuantificado que, como la droga, no fue recuperado.
Durante la audiencia de ayer, la tercera, el Ministerio Público comenzó a presentar formulación precisa de cargos, individualizados, a petición de los defensores, en tanto los abogados consiguieron que el juez prohibiera que los fiscales mostraran la acusación en data show, argumentando que era diferente a la que se presenta en el municipio de Baní, de donde el juicio fue trasladado al Distrito Nacional. Al calor de la audiencia, iniciada cerca de las 10:00 de la mañana, y con receso de dos horas, a la 1:10 de la tarde, Berroa Hiciano informó que desestimó el recurso de constitución de actor civil que le interpuso Gómez Haford, debido a que no ostenta las calidades que exige la ley.
Esto agradó a los abogados Marino Féliz, Tomás Castro y Jaime Terrero, que insisten en que el imputado no puede sostener la doble calidad de víctima y querellante y solo puede actuar como víctima. Tampoco aceptan que se adhiera a las pretensiones del Ministerio Público, que encabeza Francisco Polanco. Alegan que su actuación lesiona el derecho de los demás implicados. Empero, el juez hizo saber que no se opone a que al nica Gómez Haford se le reconozca la cualidad de víctima y su derecho de intervenir en el proceso.
La clave
Las incidencias
Otro aspecto criticado al sobreviviente Gómez Haford es que sea defendido por un defensor público y contrata a una abogada privada, que ayer presentó el escrito con el que procuraba obtener la participación de actor civil, para tener derecho a solicitar condena e indemnización. El edificio de la Fiscalía queda sitiado cada vez que se celebra el juicio. Decenas de militares y policías cercan el Palacio. Otros son apostados en los pasillos y el salón de audiencia, con armas de todos los calibres y unos con el rostro cubiertos.