Los accidentes cerebrovasculares son responsables todavía de la tercera causa de muerte en población adulta y la primera causa de invalidez y discapacidad, aseguró ayer el doctor Luis Eduardo Suazo, neurocirujano endovascular. Sin embargo, debido a los grandes avances de la neurociencia, en algunos países esta enfermedad constituye la cuarta causa de mortalidad en la misma población adulta.

Cada tres segundos ocurren de dos a tres accidentes cerebrovasculares, el 25% de ellos puede fallecer y el 50% podría resultar afectado por una discapacidad. Los accidentes cerebrovasculares se dividen en dos tipos, el isquémico y el hemorrágico. En el país, según el estimado, se producen de 16 mil a 17 mil accidentes cerebrovasculares cada año, los que se asocian a hipertensión arterial o alta presión, diabetes y otros factores que pueden ser evitados.

El más grave de los accidentes cerebrovasculares es el que cursa con sangrado, pues implica una hemorragia, los isquémicos generan una obstrucción. Existe el agravante de que una de cada seis personas mayores de 60 años podría tener un infarto cerebral y esto preocupa a los especialistas del área.