POR ANNA JIMÉNEZ
Los kilos de más no son excusa para dejar de fumar. Aunque la comunidad médica ha constatado que el abandono del tabaquismo genera un sobrepeso, también han comprobado que este aumento es transitorio y no supone riesgo alguno para la salud.

La razón: el peso que se gana durante los cuatro primeros meses, entre dos y cuatro kilos, se puede perder con la misma facilidad, una vez que haya desaparecido la ansiedad y superado la dependencia. No obstante, es muy importante no cambiar un mal hábito, como dejar de fumar, por otro muy poco saludable: comer mucho y mal. Para ello, el seguimiento de una correcta conducta alimentaria puede ser un gran aliado para los ex fumadores.

En diciembre de 2006, el Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo hizo pública la encuesta sobre conocimientos, actitudes, creencias y conductas en relación al consumo de tabaco, en la que se constató que una de cada cuatro mujeres y un 5,5% de los hombres no dejaban de fumar por el miedo a engordar. Es verdad que lo habitual es que una persona que dice adiós al tabaco engorda los primeros meses, como señala la Escuela para Dejar de Fumar, entre dos y cuatro kilos. Es fundamental que asuman este hecho y no lo infravaloren, porque puede convertirse en una excusa para volver a tener un cigarrillo entre los labios. Pero esos kilos de más no deben ser motivo de preocupación porque no se originan como consecuencia de unos malos hábitos alimenticios, sino de un desorden pasajero en las comidas, originados principalmente por la ansiedad de dejar el tabaco.

La clave, tras los cuatro primeros meses

Ahora bien, seguir ganando peso cuando se ha superado la fase física de dependencia -los cuatro primeros meses- que origina la ansiedad, sí puede convertirse en un problema de salud de primer orden. El peligro es cambiar un mal hábito (fumar) por otro mal hábito (comer mal, comer demasiado).Esto explica lo injustificable: muchas personas culpan el dejar de fumar a los 12-15 kilos o más que han engordado, y eso no es cierto. Únicamente los cuatro primeros kilos responden a un cambio metabólico acompañado de una fase de ansiedad en la que algunos alimentos pueden funcionar como ansiolíticos. Los siguientes, no.

La comida, una aliada, no una trampa

Una persona que ha sido capaz de dejar una droga tan adictiva como el tabaco, con todo el esfuerzo que supone, no puede permitirse caer en una mala alimentación y transformar la ingesta de patatas fritas o chocolate en una costumbre que sustituya al cigarro. La comida debe ser una aliada, no una trampa. Pero, ¿es posible conseguir el doble objetivo -dejar de fumar y evitar el sobrepeso- revisando los hábitos alimentarios?

Dejar el tabaco genera ansiedad, que se traduce en mal humor, nervios y sensibilidad extrema, incluso, malestar físico y taquicardias. Por lo general, a todos estos síntomas, que se prolongan por espacio de cuatro meses, se les une otro: hacer frente a la angustia que se siente al comer de manera desordenada y demasiada cantidad, en especial alimentos grasos y dulces. Contra esta tendencia, el plan de alimentación se basa en tres pilares: ayudar a limpiar el organismo de las toxinas del tabaco, calmar la ansiedad para superar la abstinencia de la nicotina y aprender a comer sano para mantenerse en un peso saludable, no engordar más de cuatro kilos y, algo muy importante, no comenzar una dieta de adelgazamiento hasta pasados seis meses desde que se abandonó el tabaco. Ese será el momento de volver al peso anterior. El tabaquismo, sin dudas se ha convertido en una epidemia mundial que cada día atrapa fumadores más jóvenes. En entrevista telefónica, especial para el suplemento Salud, conversamos con el doctor Fernando Moscoso, especialista de Nueva Orleáns, Estados Unidos y nos aclaró muchas interrogantes respecto de este mal que nos arropa indistintamente.

¿Qué medidas podemos adoptar para evitar que en 2020 pasemos a tener 10 millones de muertes relacionadas con el tabaquismo a nivel mundial?

R:. Primero que nada hay que concienciar a la población respecto de los efectos nocivos de la nicotina y como les daña no solo a ellos, sino también a todos los que se encuentren en su entorno. Crear una conciencia gubernamental que motive a las autoridades a legislar a favor de la salud de la gente y no de las compañías de este tipo, que si bien representan un gran aporte tributario, la gente debe ser siempre la ganadora de las prioridades fundamentales.

Todo el mundo sabe que en la mayoría de nuestros países se han dado los primeros pasos, estableciendo prohibiciones para que no vendan cigarrillos a menores de edad o que no se fume en lugares públicos, como escuelas, hospitales, restaurantes, aeropuertos, etc. Sin embargo, es necesario que se tomen medidas drásticas para lograr que se cumplan, pues en la mayoría de los casos, solo se quedan plasmadas, obviando la práctica.

¿Las enfermedades relacionadas con el tabaco son más agresivas en hombres o en mujeres?

R: Lo que ocurrió en la pequeña ciudad de Helena (Montana, Estados Unidos), no tiene parangón en ningún lugar del mundo. Durante seis meses se prohibió fumar en todos los lugares, excepto en la calle y los domicilios, hasta que una sentencia judicial anuló la orden. Pero el resultado fue sorprendente: se detectó un descenso del número de ataques cardíacos de un 40% durante esos seis meses, lo que no ocurrió en las poblaciones cercanas. Cuando se volvió a tolerar el tabaco, el índice de crisis coronarias retornó a sus niveles habituales, según publicaba ayer The Washington Post. La experiencia, junto a los estudios previamente existentes que demostraban cómo los no fumadores ven incrementar sus riesgos coronarios por el mero hecho de compartir espacio con fumadores, ha servido para que el Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos haya advertido por primera vez a los afectados por eventos cardíacos que eviten todos los edificios y lugares donde se permita fumar. El importantísimo centro ha exigido a los médicos que alerten a los enfermos de esta realidad que convierte al humo de segunda mano en un riesgo importante.

La iniciativa acaba de ser publicada en el British Medical Journal, donde el director asociado de la agencia sanitaria, Terry Pechacek, subraya que el humo del tabaco aumenta rápidamente la tendencia de la sangre a coagularse y, por lo tanto, a restringir su flujo hacia el corazón. La investigación, que sólo tiene en su contra la escasa población analizada, llega a alertar de que tan sólo treinta minutos de exposición a este humo bastan a una persona enferma del corazón para correr un riesgo que puede llevar a ocasionar graves crisis e, incluso, la muerte.

Fuera de esto, para contestar tu pregunta, definitivamente la mujer es más susceptible a desarrollar enfermedades relacionadas con el tabaquismo y en episodios más agresivos, es un factor adicional que le predispone a ciertos tipos de cáncer, enfermedades de las vías respiratorias e hipertensión.

¿Cuáles son los métodos más efectivos en la mujer para dejar de fumar?

R: Cuando se habla de dejar de fumar, los métodos más efectivos son los mismos para las mujeres y los hombres. Primero, escoja una fecha para dejar de fumar. Al dejar de fumar de una vez por todas existe mucha más probabilidad de éxito que tratando de cortar gradualmente. Dígale a su familia y amigos sobre sus planes de dejar de fumar, y pídales apoyo. Luego, antes de parar, tire todos sus cigarrillos, no mantenga ninguno donde vive.

Antes de que pare de fumar, piense sobre las situaciones que lo hacen querer un cigarrillo. Si usted siempre fuma después de la comida, planifique que hará en su lugar. Si usted fuma durante ciertas labores en el trabajo, figure que puede reemplazar el cigarrillo. Algunas personas gustan agarrar algo en la mano en ciertas situaciones; sustituyendo el lápiz o pluma puede trabajar para estos. Muchos se sienten a gusto teniendo algo en su boca, goma de mascar sin azúcar (chicle), o dulce, zanahoria o apio son buenas alternativas. Algunas personas usan cigarrillos para relajarse cuando están bajo tensión. Sustituyendo a caminatas, lectura o meditando, pueden ser una buena alternativa.

Muchas personas necesitan ayuda para dejar de fumar. La ayuda puede venir de distintas maneras. Dígale a su doctor, o proveedor del cuidado de salud, que usted quiere dejar de fumar. Ellos le pueden ofrecer sugerencias y apoyo. Estando en un programa de apoyo tendrá usted más probabilidades de éxito. ¿Cuáles son los métodos más efectivos en la mujer para dejar de fumar?

Medidas recomendadas para dejar de fumar

R: Hay muchas, definitivamente, pero las más usadas, con resultados comprobables son:

Los parchos
Filtros
Meditación
Hipnósis
Tratamientos de última generación multidisciplinarios
Reducción paulatina del número de cigarrillos diarios.

¿Es cierto que la vitamina A inhibe la absorción de nicotina en fumadores?

R:. He escuchado eso, pero en realidad no tengo documentación probada que lo asegure;, creo que el mejor remedio para inhibir la absorción de nicotina es creando conciencia y si se toma la decisión de fumar, saber realmente a qué se está exponiendo el fumador y en qué puede afectarle a corto, mediano y largo plazo.

Conclusión: Este vicio origina una serie de enfermedades generales, lo que a la vez redunda en un mayor número de licencias médicas.

El tabaquismo causa

El 90% de las amputaciones de las extremidades inferiores por patologías vasculares arteriales.
El 83% de las muertes por cuadros bronquiales obstructivos crónicos.
El 82% de los cánceres pulmonares.
El 50% de los cánceres de la vejiga.
El 30% de los cánceres renales.
El 30% de todos los cánceres.
El 25% de las muertes por causas cardíacas.
El tabaquismo, asociado al consumo excesivo de alcohol, causa el 85% de todos los cánceres esofágicos. El 70% de los cánceres de la boca y la faringe.