La destacada diseñadora de interiores y artista visual, Patricia Reid Baquero, reconocida por sus cuadros pintorescos y su refinado estilo a la hora de crear espacios decorativos, falleció el domingo en el Centro de Diagnóstico Medicina Avanzada y Telemedicina (Cedimat), así lo informó en sus redes sociales el Ministerio de Cultura.

Reid fue una artista plástica, arquitecta, diseñadora de interiores y escultora. Era hija del arquitecto William Read y de la actriz Margarita Baquero.

Su huella profesional se refleja en grandes residencias y establecimientos privados y ha dejado un importante legado a las artes plásticas. Su obra es admirada y reconocida en República Dominicana y en el extranjero.

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Varios editoriales de prensa coinciden en destacar las influencias arquitectónicas europeas y atemporal de los diseños de interiores de la artista.

Se destacó en el mundo del Diseño de Interiores por tratar cada proyecto, cada espacio, como una obra de arte y ganó fama como una de las diseñadoras más afamadas de este país, que cuenta con un impoluto legado que forjó a base de grandes esfuerzos y dedicación. En la industria del Diseño de Interiores, a Reid se le considera una maestra ya que, con el paso del tiempo, supo dar cátedras de cómo se pueden contar historias a través de sus obras, por lo que es impresionante ver la manera tan genuina en que ella plasmaba su grandioso arte en las dimensiones de los espacios, como si se tratasen de lienzos en blanco donde se trazan líneas y formas que destilan suntuosidad en cada rincón enaltecidos con su inigualable y auténtico talento. En las edificaciones donde trabajó, buscaba conectar lo humano y funcional, con la finalidad de satisfacer los gustos de las personas en medio de entornos acogedores y placenteros.

“Me gusta que los espacios tengan personalidad. Pueden ser clásicos o modernos, pero siempre buscando la originalidad”, dijo en una entrevista que le ofreció a la revista Ritmo Social.

Desde 1973, cautivó a los amantes del lujo y sofisticación con su firma de diseño de interiores, que se decanta por cumplir los deseos de su clientela. Sus proyectos varían entre: residencias, hoteles, restaurantes, clubes de golf, aeropuertos y museos, en el país y extranjero. Hoy el sector del interiorismo celebra su legado y llora su partida.