¡Adiós  malos recuerdos!

¡Adiós  malos recuerdos!

Las personas tienen la capacidad de aprender a suprimir de forma selectiva malos recuerdos

Unos investigadores de la Universidad de Colorado, en Estados Unidos, han descubierto que nuestro cerebro es capaz de borrar voluntariamente nuestros recuerdos más traumatizantes. ¿Te imaginas poder eliminar de tu mente tus peores experiencias?

La capacidad de olvidar es, según los autores del estudio llevado a cabo en la Universidad de Colorado (Estados Unidos), un rasgo positivo de la especie humana exclusivamente.

 Poder superar algunos malos momentos de nuestras vidas como un grave accidente de tráfico o la pérdida de un familiar, es difícil pero no imposible.

Varios investigadores del Departamento de Psicología de esta universidad han descubierto que las personas tenemos la capacidad de aprender a suprimir selectivamente los malos recuerdos de nuestra memoria, es decir, de borrar de forma voluntaria aquellas experiencias negativas que desearíamos no volver a recordar nunca.

Para poder llegar a esta conclusión, los expertos pidieron a varias personas que memorizasen un total de cuarenta pares de imágenes, entre las que aparecían un rostro humano emocionalmente neutro, una silla eléctrica, un accidente de tráfico o un soldado herido.

Luego fueron sometidas a una IRM (imagen por resonancia magnética) y se les pidió que ante la visión de la imagen neutra intentasen recordar u olvidar la imagen negativa correspondiente.

“Esta investigación mostró que los sujetos pudieron controlar su memoria emocional bajando la utilización de algunas partes de su cerebro”, explicó uno de los investigadores  del estudio que ha sido publicado en la revista «Science».

La IRM permitió visualizar en tiempo real el funcionamiento del cerebro, y gracias a ello se ha sabido que el proceso de supresión de la memoria se realiza en la corteza prefrontal, que es allí donde se eliminan los recuerdos en su aspecto sensorial y emocional.

El procedimiento es así: primero un área de la corteza prefrontal suprime la función de las zonas del cerebro relacionadas con los aspectos sensoriales de la memoria, y después otra parte diferente de la corteza prefrontal deja inactivas las zonas del cerebro en las que se procesan los aspectos emocionales.

ALGUNOS PROBLEMAS EMOCIONALES

La investigación ha permitido conocer mucho mejor el funcionamiento de nuestro cerebro, de los mecanismos implicados en el control de la memoria y del pensamiento.

A pesar de esto,  sus distintos autores esperan que estos descubrimientos permitan en un futuro llevar a cabo nuevos tratamientos contra algunos de los problemas emocionales, tales como la depresión, la ansiedad, las fobias, los comportamientos obsesivos o los estados de estrés provocados por experiencias traumáticas.

Dejar atrás lo negativo
“Creemos haber detectado los mecanismos neuronales de este fenómeno y esperamos que este descubrimiento, así como investigaciones futuras, generarán nuevos enfoques terapéuticos y nuevos medicamentos que permitan tratar un conjunto de problemas emocionales”, comentó Brendan Depue, uno de los coautores del estudio realizado.

Los autores de la investigación no han revelado, sin embargo, cuantas sesiones harían falta para que una persona que ha sufrido un grave accidente o que ha sido violada, o un soldado que ha estado en una guerra olvide sus horribles recuerdos.

Pero varios científicos de la Universidad McGill, en Montreal (Canadá), han asegurado que es posible eliminar de nuestra mente las emociones que suscitan estos traumas, temores o ansiedades con medicamentos.

Según afirman, los beta bloqueadores -un tipo de medicamento utilizado para tratar la presión sanguínea alta-  suministrados a las pocas horas de ocurrido el evento permiten que eliminemos las sensaciones que sentimos hacia la experiencia traumática, aunque nunca podremos borrar su recuerdo completamente de nuestra mente porque seguiremos siendo conscientes de que ha ocurrido.

Estos nuevos avances científicos parecen abrirnos una puerta más hacia la felicidad. Aunque por el momento se desconoce cuanto tiempo será necesario para que estos descubrimientos entren en funcionamiento.

Muy pronto muchas personas podrán olvidar aquellos capítulos de su vida que nunca tendrían que haber ocurrido.
EFE REPORTAJES

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