El presidente de la Asociación Dominicana de Industrias Textiles (Aditex) solicitó ayer a la Dirección General de Aduanas que investigue la procedencia de grandes volúmenes de mercancías que son vendidas en comercios dominicanos con etiquetas “Hecho en Estados Unidos”.

David Cortés dijo tener la sospecha de que estos lotes son introducidos a la República Dominicana desde países no pertenecientes al Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, donde el sector textil manufacturero de confecciones está en franco declive.

Indicó que las mercancías tienen precios muy competitivos, lo cual es un contrasentido porque la mano de obra en Estados Unidos es de $7.25 dólares por hora, lo que representa un costo muy superior a los del fabricante local.

Manifestó que crea suspicacia que tantas mercancías provengan de Estados Unidos, y dijo que esto sugiere que la fabricación y la colocación de etiquetas de “Hecho Estados Unidos” estarían produciéndose en un tercer país.

“Suponemos que desaprensivos aprovechan el Tratado de Libre Comercio con esa nación para confundir a la Dirección General de Aduanas, poniéndoles etiquetas de origen norteamericana”, expresó.

El presidente de Aditex dijo que como de esa manera no pagan impuestos, lesionan las recaudaciones aduanales y a las fábricas de ropa dominicanas.

David Cortés señaló que el salario mínimo en República Dominicana por las 8 horas diarias suma 473 pesos, y en Estados Unidos 58 dólares, equivalentes RD$2,514 pesos, o sea, aproximadamente 5 veces más.

Expuso que una prenda requiere intensa mano de obra directa, donde la tecnología tiene un valor importante, pero no determinante, e insistió en que las citadas prendas podría provenir de otro país diferente a Los Estados Unidos.

“La Aduana de Estados Unidos es muy celosa en la verificación y cumplimiento de los requisitos del DR-Cafta para permitir la entrada de mercancías a territorio Norteamericano sin pagar impuestos, amparadas en el tratado”, manifestó.

El presidente de Aditex expuso que si las confecciones textiles son traídas desde EE.UU u otro miembro del tratado, no pagan impuestos.