El administrador de la Lotería Nacional, José Francisco Peña Tavares, declaró que no se beneficia de las operaciones de las más de once mil bancas ilegales ya que éstas tributan a la Dirección General de Impuestos Internos (DGII). La declaración es en respuesta a la denuncia de la Federación Nacional de Bancas de Loterías (Fenabanca).
Peña Tavares aclaró que a la entrada en vigencia de la ley 139-11, para aumentar los ingresos tributarios y destinar mayores recursos a la Educación, operaban 35,956 bancas y en la DGII solo se registraron 24,483. Afirma que algunos de los 11 mil negocios de apuestas que quedaron en la ilegalidad pertenecen a miembros de Fenabanca.
Explicó que la Lotería ya no expide permisos para la instalación de bancas, ya que esa facultad le fue suspendida con la ley 139-11 y solo está para regular el sector, aunque dice que espera la creación de un reglamento del Ministerio de Hacienda para la aplicación de la ley. Abogó por una legislación que penalice la instalación ilegal de bancas.