POR ODALIS MEJIA
La Asociación Dominicana de Profesores (ADP) iniciará próximamente un proceso interno de discusión sobre la pertinencia en la aplicación de las Pruebas Nacionales o la modificación de este instrumento, instaurado en 1992 con el surgimiento del Plan Decenal de Educación.

María Teresa Cabrera, secretaria general del gremio de maestros, dijo que la bondad o validez de las Pruebas Nacionales dependen sólo del uso de sus resultados. Si aplicamos Pruebas Nacionales y no hacemos un análisis de sus resultados, intentando ver cuáles son los factores que están incidiendo para que sean esos resultados y no otros y tratamos de definir algunas estrategias para mejorar la situación, entonces no tienen sentido, dijo.

Las Pruebas Nacionales fueron diseñadas en principio para evaluar a los estudiantes, docentes y a todo el sistema. En las aplicadas recientemente se eliminó esta última parte.

Al respecto, Cabrera manifestó que aunque las pruebas implican una evaluación del profesor por los resultados de sus estudiantes al final de cada año escolar, existe un mecanismo establecido para evaluar el desempeño de los maestros, por lo cual lo que debe aplicarse con la lógica, la perspectiva, la intención y la finalidad con la que está diseñado.

Manifestó que en el marco de discusión de un nuevo plan decenal debería ser una ocasión oportuna para replantearse el tema de las Pruebas Nacionales.

Cuestionada sobre si pedagógicamente las Pruebas Nacionales son un instrumento idóneo para la evaluación, Cabrera señaló que habría que ver cómo es que están diseñadas las pruebas, qué tanta relación tienen con el currículo y con lo que está pasando en el interior del aula.

En ese tenor, el secretario de organización de la ADP, Eduardo Hidalgo, señaló que las Pruebas Nacionales han variado la carga para la promoción, ya que sólo representan el 30% de la evaluación y el restante 70% corresponde al desempeño en el aula durante el año escolar, por lo que un alumno bueno o excelente prácticamente aprueba su grado, pese a que fracase en las pruebas.

Consideró que las pruebas no deben ser una traba para los estudiantes, sino una herramienta para planificar la enseñanza y hacer comparaciones entre centros o regiones educativas.