Muchos la definen como una gran dominicana que supo hacer de la enfermedad de su hijo un bien a la patria. Es Mary Pérez de Marranzini, la mujer que tiene más de 40 años frente a la Asociación Dominicana de Rehabilitación (ARD) trabajando con amor, pasión y entrega.
Así la definieron amigos, familiares y compañeros de trabajo durante la cena de gala bailable Noche de estrellas solidarias, realizada en el salón Gran Embajador del hotel El Embajador, una emotiva velada en la que reconocieron a Mary Pérez de Marranzini.
Doña Mary, como se le dice de cariño, fue reconocida por dedicar su vida a trabajar a favor de las personas con discapacidad física.
Para esta cena, cuyos fondos serán destinados a los servicios de sostenimiento de la Asociación Dominicana de Rehabilitación, la decoración tuvo su toque íntimo otorgado con candelabros y velones en las mesas, lo que sin dudas produjo un ambiente acogedor y romántico.
Arturo Pérez Gaviño, director ejecutivo de la ADR, expresó que esta celebración se la dedican a doña Mary, quien se ha entregado en cuerpo y alma a la obra de rehabilitar.
Los asistentes disfrutaron de las canciones de Maridalia Hernández y Niní Cáffaro, acompañados por el maestro Jorge Taveras, así como del tenor Enrique Pina, Antón Fustier y la orquesta de la Marina de Guerra, que puso la noche en movimiento con alegres merengues.
Las frases
Marinita de Villanueva
Doña Mary es una gran mujer y gran dominicana, con una responsabilidad social enorme.
Ana Marranzini
Para mí, alcanzar a mi abuela es como alcanzar la torre Eiffel, es una mujer perseverante y entregada con otros.
Celso Marranzini
Definiría a mi madre como una mujer dedicada y entregada, que supo, cuando me dio polio, sacar muchas cosas positivas.
Margarita Moronta
Mary es un ser maravilloso que ha dedicado su vida a hacer obras de caridad, es la Madre Teresa dominicana.