Hoy 
POR CANDY MALDONADO
BRISTOL, Connecticut. – En las últimas semanas el dominicano Adrián Beltré ha sido el terror de los lanzadores de la Liga Nacional, llegando a 42 jonrones y casi 100 empujadas luego de las acciones del 29 de agosto. El tercera base de los Dodgers se ha echado en sus hombros a su equipo, que ha mantenido su ventaja en el Oeste de la Liga Nacional sobre San Diego y San Francisco.
La paciencia de Los Angeles con Beltré, firmado hace una década, le ha rendido frutos a la organización, que estaba a punto de perder la fe en el nativo de Quisqueya hace un año cuando adquirieron al antesalista veterano Robin Ventura.
Pero con la actuación de Beltré desde entonces, Ventura ha visto poca acción en la esquina caliente de los Dodgers, y no es para menos. Beltré se ha convertido en uno de los grandes favoritos para el premio del Jugador Más Valioso de la Liga Nacional, con su gran producción en un conjunto que ha tenido algunos contratiempos en su alineación.
Recuerden el cambio tan criticado por muchos (incluyéndome a mí) que envió al receptor Paul Lo Duca a los Marlins. La ausencia de Lo Duca y el bajo rendimiento de Shawn Green durante todo el año ha dejado mucha responsabilidad a Beltré, quien ha respondido en grande, con números de poder y producción que han sobrepasado las expectativas de todos para este jugador.
En un momento en que pensábamos que los Dodgers se debilitaban en su ofensiva, y en el punto más crítico de la campaña cuando luchan por mantener el primer lugar, Beltré se ha crecido. Si ésa no es la definición de Más Valioso, no sé qué se tiene que hacer para ser considerado para dicho galardón.
Hace un mes, escribimos aquí que Albert Pujols era un fuerte candidato para el premio. Todavía creo que sí, porque ya llegó a los 40 jonrones y las 100 empujadas en el equipo con mejor récord del béisbol, y para muchos el mejor conjunto de las mayores.
Pero (en el béisbol siempre hay un ¨pero¨) lo que ha hecho desde entonces el señor Beltré es simple y llanamente impresionante, fuera de serie, o si usted quiere, fuera de liga, como decimos en Puerto Rico.
Adrián Beltré se ha convertido en la peor pesadilla para los lanzadores de la Liga Nacional. Tal así, que para los pitchers del viejo circuito es como tratar de comer sopa con un tenedor: No hay forma de sacarlo.
