CARACAS, (AP).-  Los líderes de la oposición en Venezuela, que buscan posicionarse en la contienda electoral del 2012, participaron en su primer debate público y televisado, y expusieron propuestas para resolver los más apremiantes problemas internos del país, que van desde el crimen rampante hasta el elevado desempleo.

Diego Arria, Pablo Pérez, Leopoldo López, Henrique Capriles y María Corina Machado tomaron turnos el lunes para criticar las políticas establecidas por el presidente Hugo Chávez desde 1999, culpando al mandatario de ideología socialista de muchos de los problemas del país y prometiendo un cambio radical en caso de ser electos a la presidencia el año entrante.

 Los políticos criticaron vehementemente al gobierno de Chávez por no lograr combatir de manera efectiva al crimen, lo que los venezolanos repetidamente identifican en encuestas como el peor problema del país.

 «Yo quiero ser presidente porque no quiero que nadie caiga por culpa de la violencia», dijo Henrique Capriles, gobernador del estado de Miranda, quien lidera las más recientes encuestas en comparación con las esperanzas de la oposición. Arria dijo que acabará con el crimen enfocándose en atacar el tráfico de drogas, y especificó que el tráfico de cocaína ha generado que se propague la corrupción entre la milicia y que la drogadicción entre el creciente número de jóvenes ha impulsado una ola criminal sin precedentes.

 «El tráfico de drogas desestabiliza a una nación», dijo Arria. Todos los opositores condenan fuertemente lo que ellos perciben como la insaciable sed de poder de Chávez y prometieron tomar medidas par asegurar que el próximo líder de la nación no ejerza un poder sin freno al capacitar a otras instituciones como la Corte Suprema para cuidar la influencia del Ejecutivo.

«Hay que convocar una Asamblea Constituyente y establecer un período presidencial de tres años», propuso Arria. El debate del lunes, el primero de este tipo en décadas involucrando aspirantes a la presidencia, fue organizado por estudiantes universitarios. Chávez, un ex funcionario militar que dice se está recuperando de un cáncer, no fue invitado a participar. desde su primera elección en 1999, Chávez jamás ha aceptado desafíos de sus opositores para formar parte en un debate público y televisado.

Se planean al menos otros dos o tres debates antes de que una coalición de partidos opositores realicen el 12 de febrero una elección primaria para escoger a un solo candidato presidencial, lo mismo que los candidatos que competirán contra los aliados del presidente en las elecciones estatales y municipales. López evitó las preguntas orientadas a identificar un ganador del debate. «Venezuela ganó con este debate», dijo.

 «Hay que organizar debates porque son necesarios para saber cuáles son las propuestas, las ideas e iremos avanzando juntos». Mario Silva, cercano aliado de Chávez y miembro del partido de gobierno, criticó a los participantes en el debate, destacando que el único punto de unificación de los políticos de oposición es su deseo de desbancar a Chávez y poner fin a la marcha hacia el socialismo.

 «Todos ellos tiene el mismo plan del gobierno: acabar con los advances de la revolución», agregó. Los partidos políticos que pertenecen a la coalición han prometido no permitir que sus propias diferencias interfieran con el objetivo de formar un frente común en contra de Chávez en las elecciones del 7 de octubre de 2012. La coalición también está enfocada a elegir candidatos únicos para las elecciones estatales y municipales de principios de 2013. La desorganización y discordia ha plagado de problemas a los partidos de oposición, debilitando sus intentos de representar un fuerte desafío al gobierno de Chávez.

Chávez continúa siendo el político más popular de Venezuela, pero ha ganado más críticos debido a los problemas que enfrenta su gobierno para solucionar los problemas apremiantes como la severa escasez de vivienda para los pobres, el incremento de la violencia criminal y la mayor tasa de inflación de América Latina.