Samaná. Un delegado de la Misión Permanente de República Dominicana ante las Naciones Unidas (ONU) advirtió ayer que la ocupación de la franja marina de esta zona por parte de grandes proyectos hoteleros podría desatar acciones de violencia de de grupos locales.

Erick Espinal, dirigente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) en esta provincia, afirmó que el asalto gradual de las playas de Las Terrenas está impidiendo que los ciudadanos hagan uso de los 60 metros que dijo son propiedad del Estado, situación que limita sus actividades.

Espinal calificó de urgente poner en marcha un plan de regulación de establecimientos turísticos, tras considerar de “insostenible” la privatización de las playas del municipio.

Uno de los problemas que mayor “dolores de cabeza” ha causado en los últimos tiempos es la Ley 305 de fecha 23 de mayo de 1968, encargada de regular las construcciones que se realizan en la franja marítima, de la que sólo el Poder Ejecutivo puede autorizar su utilización.

Distintos negocios que vierten  desechos al mar, tienen estacionamientos improvisados y hasta áreas verdes ocupadas, violando lo estipulado por la ley.