Advierte plan perjudica al sector farmacéutico nacional

Advierte plan perjudica al sector farmacéutico nacional

La Asociación de Representantes, Agentes y Productores Farmacéuticos (ARAPF) cuestionó distintos aspectos del Plan Maestro de la Política Farmacéutica Nacional elaborado por las autoridades sanitarias con la participación de asesores del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), tras considerar que perjudica al sector farmacéutico nacional.
En un extenso comunicado dirigido a la ministra de Salud Pública, doctora Altagracia Guzmán Marcelino, que se publica en esta edición, la ARAPF expresa que el plan constituye «un atentado contra la existencia, permanencia y supervivencia del sector farmacéutico privado», propósito que atribuye a los asesores del organismo internacional a los que acusa de mostrar «mala disposición hacia el sector privado».

La entidad cuestiona distintos aspectos del plan, entre estos la propuesta de crear una Agencia Nacional de Alimentos, Medicamentos y Productos Sanitarios, considerando que es innecesaria y que duplicaría funciones de la Dirección de que dispone el Ministerio de Salud Pública con esa misma finalidad.
De igual modo aboga porque se dedique más tiempo y capital de trabajo a la capacitación institucional de recursos humanos para brindar un servicio más ágil y de mayor calidad a los usuarios y la vigilancia farmacéutica.

En otra parte de su exposición, la ARAPF señala que la mayor parte del mercado nacional de medicamentos está servido por productos genéricos, sin que la comercialización de genéricos de marca muestre diferencia de calidad ni ostensible de precios.
Advierte que el mercado farmacéutico nacional ha operado por más de cincuenta años con normalidad en forma «ética y eficiente» y con elevado grado de competitividad.
Al respecto hace notar que el Resumen Ejecutivo del Plan Maestro presentado por Salud Pública reconoce que «el diagnóstico del mercado dominicano no muestra problemas de primer orden en materia del nivel de precios de los medicamentos disponibles» por lo que estima innecesaria la intervención de las autoridades en su funcionamiento.

Por otra parte, la entidad rechaza de plano, calificándola de «totalmente falsa», la referencia que contiene el Plan donde se afirma que «en República Dominicana existe una percepción generalizada, no basada necesariamente en la evidencia, de la baja calidad de los medicamentos disponibles en el mercado».
Tal, afirma la ARAPF, pudiera atribuirse a los que expenden las llamadas Farmacias del Pueblo, pero nunca a los fármacos que se dispensan en el mercado farmacéutico privado «cuya calidad jamás ha sido puesta en duda por la clase médica dominicana».

Al referirse a los medicamentos falsificados y de contrabando, «que constituye un grave riesgo para la salud pública», el comunicado atribuye a las autoridades haber mostrado falta de voluntad para enfrentar el problema pese a que en el país existe la Ley 22-06 sobre Medicamentos Ilegales, promovida por la propia ARAPF, al amparo de la cual han sido condenados varios violadores de la misma.

Finalmente, la entidad rechaza la recomendación de que las ARS organicen su propia red de proveedores de medicamentos, advirtiendo que el sistema de compras centralizadas no ha funcionado apropiadamente en ningún país donde se ha promovido falta de voluntad para enfrentar el problema.

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