El ingeniero eléctrico Bernardo Castellanos advirtió ayer que en poco tiempo el Gobierno estaría destinando unos US$6 mil millones en subsidio al sector eléctrico si no toma la firme decisión de invertir en la reducción de las pérdidas de las distribuidoras unos US$800 millones en dos años, y disminuir los gastos corrientes en el sector.

En un estudio sobre el Impacto de la Reducción del Precio del Petróleo, el experto eléctrico expuso que “el Estado podría estar erogando una suma total que oscilaría entre los US$5 mil millones y US$6 mil millones solo en subsidio directo al sector eléctrico, porque de no hacerlo corre el riesgo de que el país sufra apagones más intensos y frecuentes a los actuales”.

Estimó que para el 2014, “con todo y la reducción del precio del petróleo, el déficit en flujo de caja del sector eléctrico (distribuidoras + CDEEE) se situará una vez más en el orden de los US$2,000 millones, y para el 2015, al ritmo que van los acontecimientos, no se espera ninguna mejoría, a pesar de la caída en los precios del petróleo”.

Según el experto, la inversión en la reducción de las pérdidas de las distribuidoras es menos del 30% de la inversión que se haría en la construcción de las plantas a carbón de Punta Catalina, y menos del 15% de la inversión que se requeriría para que las distribuidoras pudieran comprar este año toda su energía a US$0.12/kwh.

Esta inversión de US$800 millones se puede realizar en un menor tiempo y con impactos positivos mayores en la reducción de las altas pérdidas, del elevado déficit financiero y subsidio al sector eléctrico, cuyos resultados podrán observarse más rápidamente que los efectos de la entrada en operación de las plantas a carbón y/o de la conversión de todo el parque de generación para que solo opere a base de carbón, gas natural, hidroeléctricas y energía eólica.

“Si el Gobierno ha podido comprometer las finanzas públicas para ejecutar un proyecto de inversión en las plantas a carbón de Punta Catalina, que implica unos US$3,000 millones en por lo menos cinco años, a razón de unos US$600 millones en promedio por año, más fácil resultaría hacer un compromiso serio para una inversión en distribución de unos US$800 millones en dos años, a razón de unos US$400 millones por año, para atacar y resolver las altas pérdidas y elevado déficit financiero que experimenta el sector eléctrico, que constituyen uno de los peores cánceres que corroe y hace metástasis acelerada en las finanzas públicas”, detalló Castellanos.

Estimó que el posible ahorro de US$300 millones en 2015 por la baja del barril de petróleo, apenas representa el 20% del subsidio directo al sector eléctrico estimado este año en unos US$1,500 millones.