ODALIS MEJIA
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El vicepresidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) Eligio Jáquez advirtió ayer que la vanidad y el sectarismo del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) puede empujar a medio país que le negó el voto por la ingobernabilidad.
Si queremos país estable y democracia vigente, que el PLD no sueñe con ignorar a la mitad del pueblo que le negó su voto. Del PLD depende que el PRD y demás sean parte de la gobernabilidad. También es tarea del PLD y su gobierno.
Jáquez señaló que el PRD aunque no ganó las elecciones, está unido, entusiamado y capaz de valerse por sus propias fuerzas bajo las enseñanzas aprendidas.
Recordó que el PRD repuntó en casi medio millón de votos más que en 2004, gracias a la incorporación a la campaña de la dirigencia histórica del partido, la ardua dedicación del candidato presidencial, la reciedumbre moral de la dirigencia a nivel nacional y el exterior, el trabajo electoral, la eficiencia de su centro de cómputos, junto al entusiasmo espontáneo y de sacrificio y servicio del perredeismo. A lo interno, Jáquez plantea que el PRD debe revisar la medida de dejar sin vigencia los comités de base tradicionales y que sus altos dirigentes deben darle más calor a los de abajo porque al perredeista le gusta saberse querido, visitado, valorado.
Detalló que durante la pasada campaña más de 30 pueblos del interior no pudieron ver y escuchar a su candidato presidencial, lo que creó ciertos recelos. Los dirigentes locales del PRD, hay que decirlo, siempre fueron presa de dudas sobre la legitimidad de su representación frente al último proyecto político.