Hoy 
Por ALTAGRACIA ORTIZ G.
Las enfermedades cardiovasculares, los problemas de hipertensión arterial y los accidentes cerebrovasculares se han convertido en una especie de volcán en erupción que pone en riesgo la salud de los dominicanos.
La advertencia la hizo ayer el doctor Héctor Mateo, cardiólogo y miembro de la Sociedad Dominicana de Cardiología, en ocasión de celebrarse el próximo domingo el Día Mundial del Corazón. El especialista sostuvo que las comidas rápidas, también conocidas como basura o chatarra, la falta de ejercicio y de educación, contribuyen con la epidemia de enfermedades cardiovasculares.
Estamos sentados sobre un volcán que va haciendo erupción lentamente y eso se evidencia con el aumento de los ataques cardíacos, los accidentes cardiovasculares, sostuvo.
Mateo dijo que son muchos los hipertensos que tienen esa condición y no lo saben, mientras otros lo saben, pero por una u otra razón no llevan el tratamiento.
También se registra un aumento importante de personas con sobrepeso y obesidad, lo que está relacionado con el estilo de vida, dijo el cardiólogo.
Señaló que se hace necesario que los dominicanos modifiquen sus hábitos alimenticios.
Hace unos años, el Instituto Dominicano de Cardiología realizó una encuesta que aseguraba que el 16 por ciento de la población tenía problemas de obesidad, pero esa cifra es ahora mucho más alta. La obesidad, dijo, afecta el aspecto psicológico de las personas, pero sobre todo, genera otras enfermedades y puede llevar a la muerte. Se van asociando factores que llevan a alta presión. El cardiólogo abogó porque los dominicanos retomen su dieta saludable y que el desayuno escolar se haga en base alimentos sanos.
Probablemente, sostuvo, la clase media y baja tenga mayores niveles de obesidad, dado que falta educación e información.
Las enfermedades cardiovasculares constituyen la tercera causa de muerte en el país, mientras el infarto agudo del miocardio se registra como la segunda enfermedad más común en la República Dominicana.
Las estadísticas dicen que de cada 100 infartos, de 10 a 15 fallecen antes de llegar a un centro de salud.
Los cardiólogos, nutricionistas y diabetólogos recomiendan que las personas reduzcan su consumo de carbohidratos y las grasas saturadas.
La obesidad y el sobrepeso constituyen hoy día una gran preocupación para los especialistas y la Organización Mundial de la Salud la considera la pandemia del siglo.
