La Organización Mundial de la Salud indica que el virus puede contagiarse con cualquier clima, y no hay motivo para creer que el frío pueda matarlo.
La agencia de alud de Naciones Unidas señala que el coronavirus se contagia principalmente de persona a persona. La lluvia y la nieve podrían diluir los retos del virus en bancos y otros objetos situados en el exterior, pero no se cree que el contagio por contacto con superficies sea un factor importante en la pandemia.
La preocupación real asociada al tiempo frío es que las temperaturas más bajas hacen más probable que la gente esté en espacios cerrados que podrían verse más abarrotados, facilitando la expansión del virus.
Los estudios han demostrado que un porcentaje significativo de los contagios se producen dentro de los hogares, donde la gente comparte zonas comunes como cocinas y baños.
La OMS y otras organizaciones también han advertido sobre el riesgo en espacios cerrados con mala ventilación, donde es más fácil contagiarse porque las partículas infecciosas pueden pasar horas suspendidas en el aire.
Se han identificado eventos supercontagiadores en clubes nocturnos, gimnasios e incluso ensayos de coros. El virus no se transmite con tanta frecuencia en espacios cerrados porque el aire fresco dispersa las partículas de virus y es más fácil que la gente mantenga la distancia entre sí. Sin embargo, los expertos advierten que el contagio sigue siendo posible cuando la gente pasa largos periodos de tiempo al aire libre cerca de otras personas y sin mascarilla.
Las autoridades sanitarias afirman que la mejor forma de evitar los contagios es llevar mascarilla en público, mantenerse a dos metros (6 pies) de las personas con las que no se convive y lavarse las manos a menudo.