Dos haitianos legales fueron detenidos, uno liberado el día después, el otro deportado porque no permitieron buscara el pasaporte en habitación, de donde lo sacaron sin camisa
Residentes en el sector capitalino La Yagüita de los Jardines del Norte, afectados la tarde del jueves por un operativo policial, denuncian el proceder atropellante de los agentes que llegaron en dos camionetas y un camión, rompieron puertas de una pensión, sacaron a dos jóvenes de sus casas y detuvieron a otro camino a su trabajo.
Una de las víctimas es Fernando Fabián, que contó veía televisión cuando las patrullas echaron abajo su puerta y lo detuvieron, lo que quedó grabado por celulares de vecinos. Cuatro horas más tarde fue despachado del “furgón” del ensanche Naco.
“Ya esta es la segunda vez que me hacen eso. No debe ser así, esa manera no es correcta y esas personas deben medir su proceder”, exclama.
Un policía incluso entró a la segunda planta de la casa contigua a la pensión, para de ahí “volar” la malla y cruzar a la azotea, lo que condenan los habitante de la residencia ultrajada, en la que viven niños.
A la camiona pese a estar legales
Los haitianos Jesse Vixama y Marc- Elie Fortere tuvieron un destino distinto al de Fernando. Al primero lo llevaron a rastras al camión cuando transitaba del callejón peatonal I hacia la calle para laborar.
Lo subieron, le vaciaron el bulto en el que tenía el almuerzo, colocaron la comida sobre la tabla que sirve de asiento. Pero la educación acabó cuando le arrojaron la “lonchera”, un desodorante cayó, el uniformado lo miró con desdén y a Jesse no le quedó más que tomarlo triste.
Pese a que portaba sus documentos, lo llevaron al destacamento y solo al otro día lo liberaron.
Su coterráneo la pasó peor. Sacado sin camisa de la pensión intervenida, y subido en la “camiona” gritaba que su pasaporte estaba en la habitación, que le permitan buscarlo o que dejaran que algún vecino lo hiciera, que tenía todo en orden. Sus ruegos fueron la voz que clama en el desierto y lo deportaron.