El reputado periodista de televisión Guillermo Tejeda denunció ayer los escasos progresos registrados en la investigación del asesinato de su hijo Guillermo Tejeda Krawinkel, un oficial al servicio de la Dirección Nacional de Control de Drogas. Tejeda dijo a los periodistas que los esfuerzos en la investigación han sido frustrados “por el brazo del narcotráfico”.

El periodista Guillermo Tejeda declaró ayer que a un año del asesinato de su hijo Guillermo Tejeda Krawinkel las investigaciones están en un punto muerto, debido a que los esfuerzos que se han hecho en ese sentido han sido frustrados “por el brazo del narcotráfico”.

Dijo que  el poder del dinero “ha doblegado voluntades” y se ha sumado al  brazo del narcotráfico “enquistado en sectores policiales, judiciales, militares y en el propio organismo encargado de combatir el mal”, expresó el comunicador sobre el asesinato de su hijo acaecido el 3 de marzo del 2008 en San Cristóbal.

Explicó que a raíz de que el Procurador General, Radhamés Jiménez, y el jefe de la Policía Nacional, Rafael Guillermo Guzmán Fermín,  designaron comisiones al margen de los investigadores tradicionales el caso ha adelantado, “pero ahora está en un punto muerto”.

Evidencias ocultas. Guillermo Tejeda sostuvo  que desde el primer momento ha dicho que hay policías y militares involucrados de manera estrecha en el hecho y que las investigaciones hechas hasta el momento han demostrado que a cambio de ”sumas millonarias”, policías  borraron evidencias de la escena del crimen.

Al momento de su muerte  Tejeda Kranwinkel era encargado de la Dirección Nacional de Control de Drogas  en  Jarabacoa, La Vega.