POR ALEYDA PLASENCIA  
El economista jefe para América Latina y el Caribe del Banco Mundial (BM), Guillermo Perry, dijo ayer que la República Dominicana, pese a tener una economía muy dinámica, su  crecimiento económico no ha logrado ser suficientemente efectivo.

Sostuvo también que las principales razones que inciden en la falta de efectividad al respecto están vinculadas con el hecho de que hay una parte importante de la población que por no tener acceso a educación de calidad o por no poseer los activos necesarios para poder ser más productiva, no ha sido partícipe en el grado deseado, de los beneficios de ese crecimiento y contribuir al mismo.

Perry habló en rueda de prensa tras presentar los resultados de un estudio del BM sobre América Latina y el Caribe, titulado “Reducción de la pobreza y el crecimiento: Círculos virtuosos y círculos viciosos”.

Perry planteó que si se quiere que en este país haya más éxito en la reducción de la pobreza, es muy importante complementar las políticas de crecimiento con un esfuerzo mayor para que haya más acceso a educación de calidad para las familias e infraestructuras productivas en las regiones que no se han beneficiado mucho del crecimiento económico.

Tanto la rueda de prensa como la presentación del estudio fueron realizados en el Recinto Santo Tomás de Aquino de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra.

Perry también recomendó políticas de acceso al crédito para la pequeña y mediana empresa y consideró necesario resolver otros problemas, tales como el de la energía eléctrica y mejorar sus instituciones.

Dijo que la República Dominicana, en comparación con otros países de la región, ha tenido un crecimiento envidiable, con una economía muy dinámica que ha demostrado que puede crecer mucho. Pero ese crecimiento económico, aún cuando ha ido reduciendo en alguna medida la pobreza, no ha logrado ser suficientemente efectivo, insistió.

Sobre el mismo tema, Omar Arias, economista senior del BM para América Latina y el Caribe, al intervenir en la rueda de prensa, sostuvo que en la política de asistencia social o de protección, ocurre en el país que los programas que hay son muy ineficientes. “Hay una muy mala focalización, una alta porción de los recursos no van a los pobres y hay mucha duplicación, o sea, programas que tienen objetivos similares que se repiten, fragmentación, casi todos los ministerios públicos hacen asistencia social”, sostuvo Arias. Planteó que debe racionalizarse y mejorar la calidad del gasto público actual, usarse bien lo que se gasta y consideró también que en el mediano plazo, en dos o tres años, habrá la necesidad de aumentar el nivel de recaudación.

Manifestó que cuando se vaya a realizar una nueva reforma fiscal, la misma debe hacerse con criterio de equidad.

Arias sostuvo que en el caso dominicano, con relación a los problemas de la energía, salud, educación y agua, el principal problema no es de cobertura, sino de calidad.

Aclaró que en la educación media, sí hay un problema de cobertura.

Perry, por su lado, al responder preguntas sobre las expectativas de la economía dominicana, dijo que “las oportunidades no pueden ser mejores, pues este es un país que ha mostrado una dinámica económica impresionante, una capacidad empresarial de su gente, especial”.

 Al respecto, consideró que el país ha aprovechado muy bien el mercado más grande y dinámico del mundo: Estados Unidos.

“Ahora, con el DR-CAFTA (Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos) va a tener (la República Dominicana) un acceso permanente, garantizado y seguro a ese mercado”, añadió.

Para aprovechar ese mercado de manera sostenida hacia el futuro, Perry planteó que hay que hacer que un número cada vez más amplio de dominicanos “pueda aprovechar esas oportunidades y por esos es que insistimos en la importancia de hacer un esfuerzo muy grande y mejorar el acceso a educación de calidad”.

También refirió el dato de que solamente la mitad de los niños del país están terminando la educación primaria y una tercera parte de los niños entran a la secundaria.

Igualmente, citó el dato de que alrededor del 20% termina la escuela secundaria.