Hoy 
POR ROSA ALCANTARA
El Partido Revolucionario Dominicano (PRD) afirmó ayer que las decisiones de la Cámara Contenciosa de la Junta Central Electoral (JCE), constituyen un duro revés al ejercicio de los derechos constitucionales y electorales en la democracia dominicana, al no permitir las apelaciones e impugnaciones presentadas por los candidatos en los niveles congresuales y municipales.
En conferencia de prensa, el presidente y los secretarios general y de Organización del PRD, Ramón Alburquerque, Orlando Jorge Mera y Aníbal García Duvergé, respectivamente, dijeron que las apelaciones e impugnaciones fueron fundamentadas en derecho y debieron ser ponderadas por el tribunal de elecciones hasta las últimas consecuencias en búsqueda de la verdad. Estas decisiones reafirmaron una vez más la necesidad de que nos aboquemos a una profunda reforma electoral, para evitar que se repitan las graves burlas al derecho de elegir ocurridas recientemente, indicó el PRD.
Señaló que entre las tantas violaciones verificadas se citan el uso y abuso de los recursos del Estado, sonsacamiento de dirigentes de la oposición, uso del poder militar para amedrentar juntas municipales, irregularidades en el llenado de las actas de escrutinio, vicios en el proceso pre y post electoral y vulneración a la voluntad soberana del pueblo dominicano.
El PRD dijo que aún cuando no está de acuerdo con las decisiones de la Cámara Contenciosa de la JCE, las respeta.
Manifestó que en vísperas de la conclusión del proceso electoral, el PRD convocará al presidium para el lunes 12 de junio a las cuatro de la tarde, para iniciar el proceso de evaluación sobre la participación del partido en el pasado proceso electoral.
Indicó que del mismo saldrán las recomendaciones para que la Comisión Política y los demás organismos, en todo el territorio nacional, implementen el plan de acción que será presentado y enriquecido durante la evaluación que se inicia a partir de la próxima semana.
Tanto Alburquerque como Jorge Mera dijeron estar comprometidos con la continuación de la renovación del PRD que se inició en el 2005, así como con el respeto a la institucionalidad y a la disciplina, con la modernización y dinamización de todas las secretarías y los departamentos nacionales, incluyendo los centros de formación política y electoral, y con el establecimiento de las reglas claras y precisas de selección del candidato presidencial para las elecciones del 2008.
Aseguraron que el PRD ha librado una batalla digna, por lo que ahora deberá prepararse mejor, con una visión incluyente y moderna, con sentido de responsabilidad y sobre todo, imponerse normas disciplinarias a fin de conquistar nuevamente la confianza del pueblo exhibiendo una conducta coherente, propositiva, contribuyendo a resolver los problemas fundamentales del país y para constituirse en opción de poder en el 2008.
