POR LLENNIS JIMÉNEZ
Los ayuntamientos no hacen el trabajo que los munícipes esperan de las autoridades electas, porque la Liga Municipal Dominicana (LMD) no ejerce su función de organismo asesor técnico, sino de agente de retención de los fondos que les destina el gobierno, consideró ayer el consultor municipal, Waldys Taveras.

Señaló, además, que no tiene sentido que se utilice la LMD para distribuirles los recursos a los cabildos, por entender que ese dinero el gobierno lo podría repartir a través de una simple transferencia de fondos en el Banco de reservas, de una de sus áreas financieras.

 «Nadie sabe aquí cómo gasta la Liga el presupuesto», sostuvo.

La LMD se extralimita tanto en su competencia, según Taveras, por la falta de institucionalidad y respeto a la autonomía municipal, ya que hasta se dedica a comprarles material gastable y equipos pesados a la mayoría de los ayuntamientos.

 «Por ejemplo, el papel que necesita el ayuntamiento de Guaimate lo compra la Liga Municipal y luego se lo descuenta», agregó.

Dijo que la LMD opera sin que nadie fiscalice los recursos que gasta, tras indicar que esa labor corresponde a los partidos políticos, por disposición de la ley.

Taveras dijo que la LMD debe ser la entidad que estimule a los ayuntamientos a preparar los proyectos, como de disposición final de residuos sólidos, manejo financiero, de planificación y obras públicas urbanas, pero que nada de eso están realizando ese organismo.

LMD SIN VIGILANCIA

Explicó que ningunos de los partidos ha designado el representante municipal, ni ha puesto a funcionar la comisión que plantea la Ley 66, en su artículo 12, para supervisar los fondos que reciben los ayuntamientos y el 5% que se entrega a la propia LMD.

Taveras manifestó que a un año de estar en vigencia la legislación, no se ha creado la comisión que deberá estar compuesta por un miembro designado por el Poder Ejecutivo y un representante de cada uno de los partidos con representación municipal.

Sostuvo que a la LMD le compete también, de acuerdo a su reglamento interno, desarrollar los programas de educación y de formación de la empleomanía y de los funcionarios municipales, pero que tampoco lo hace.

Expresó que por no ser supervisada, en la LMD pueden producirse todas las irregularidades posibles en un organismo que maneja fondos públicos.

«Puede ser que ahí no se esté ejecutando el presupuesto como se aprobó. Lo normal, se puede estar ejecutando compras sin el cumplimiento de los procedimientos, porque no hay fiscalización», sostuvo.

Calificó de violación a la autonomía de los ayuntamientos y de «disparate», el hecho de que para los cabildos hacer préstamos a entidades bancarias, tengan que contar con la autorización de la LMD. «No es una aprobación, la banca quiere tener la garantía de que quien distribuya los cuartos les quite el dinero, sea garante de que esa persona va a pagar. Para mí, la Liga es un agente de distribución y retención de los fondos municipales», agregó.

Taveras señaló que el secretario ejecutivo de la LMD lo elige su comité ejecutivo, integrado por los presidentes de ayuntamiento de cada provincia. Precisó que como el Partido Revolucionario Dominicano (PRD) tiene mayoría en ese organismo, decidió apoyar a Amable Aristy Castro en la secretaría ejecutiva. Planteó que esta elección es un aspecto eminentemente político.

Expresó que Aristy Castro ha logrado mantenerse en el cargo, porque la mayoría de los síndicos y los regidores no tienen interés en el desarrollo municipal. 

El consultor municipal consideró, no obstante, necesaria, la función de la LMD, porque a su entender, existe un sin número de ayuntamientos que por no contar un equipo técnico, no tienen la capacidad económica para generar los trabajos técnicos para desarrollar un gobierno local.

Consideró que los ayuntamientos andan «manga por hombros» por el deficiente trabajo de la LMD.

Ese organismo recibe el 5% del 6.7 por ciento que el gobierno entrega a los ayuntamientos de las recaudaciones fiscales.