Enmanuel Esquea Guerrero dijo que es preocupante que los presidentes del Senado y de la Cámara de Diputados afirmen que el contrato con la Sund Land no tenía que ser ratificado por el Congreso Nacional.
POR PEDRO GERMOSEN
El doctor Enmanuel Esquea Guerrero, presidente de la Comisión Consultiva del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), advirtió ayer que la democracia dominicana está en peligro debido a la negativa del presidente Leonel Fernández a reconocer violaciones flagrantes a la Constitución y las leyes.
Tras señalar que los contratos con la Sund Land, por US$130 millones y US$200 millones, violan la Carta Magna, el político y jurista afirmó que cuando un presidente se considera omnipotente, como es el caso del doctor Fernández, se está a un paso de la dictadura.
Ni Lilís burló al Congreso con el préstamo de la Harmont, expresó Esquea Guerrero, quien añadió que ninguno de los dictadores dominicanos ha cometido el error de la administración del presidente Fernández.
Significó que la separación de los poderes es lo que garantiza la supervivencia de la democracia.
Recordó que en 1976 el entonces presidente Joaquín Balaguer remitió a la aprobación del Congreso un préstamo negociado entre la Falconbridge y el Banco Mundial, del cual el gobierno sólo era avalista.
Recordó asimismo que en las primeras constituciones de la antigüedad, alrededor del 1,265, se establecía que el rey no podía disponer ningún gasto sin convocar al Consejo, que devino en parlamento y en los congresos de la era moderna.
Igualmente, dijo Esquea Guerrero, la primera Constitución dominicana, del 1844, consagró que el Poder Ejecutivo no podía gastar más de lo que indicaba la Ley de Gastos Públicos.
Al ser entrevistado por el periodista Guillermo Gómez en el programa Aeromundo, que se difunde por Color Visión, el dirigente perredeísta dijo que el jefe del Estado utilizó sofismas para justificar los préstamos con la Sun Land.
Afirmó que esos contratos sí comprometen al Estado, porque el ingeniero Félix Bautista, director de la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado, firmó, a nombre del gobierno, 19 pagarés por la suma de US$6.7 millones cada uno, para garantizar el monto de los US$130 millones.
Esquea Guerrero leyó cláusulas del contrato según las cuales el Estado deberá pagar la suma en caso de que la Sund Land quiebre o se produzca cualquier otra circunstancia que atente contra el contrato.
El dirigente perredeísta dijo que esas violaciones ponen en peligro la democracia.