Elías Piña. El 57.8% de los habitantes fronterizos ha emigrado a las grandes ciudades para continuar sus estudios, mejorar sus ingresos y suplir otras necesidades.

Así lo afirmó el senador por esta provincia, Adriano Sánchez Roa, quien indicó que hace diez años la región fronteriza poseía el 5.25% de la población nacional, pero que se redujo a 4.93%, con relación a todo el país.

Dijo que en las provincias de la frontera residen 491,265 personas, cuando debían poseer 1,159,949 habitantes, lo que revela que más de la mitad de los fronterizos pululan en las grandes ciudades en busca de una mejor vida, dijo.

Por esto abrigamos la esperanza de que a los esfuerzos y aportes sin precedentes del presidente Leonel Fernández, se puedan agregar iniciativas emprendedoras de nuestros empresarios, la cooperación económica de los organismos financieros internacionales, en un plan de desarrollo, y que los hacedores de opinión enfoquen esta necesidad, dijo al participar en el programa El Pueblo Cuestiona.

Debo decir como elíaspiñense que la bondadosa y decidida participación del empresariado en el proyecto Macasías, una excelente iniciativa del Presidente Fernández, es una demostración de que podemos unir las acciones del Gobierno, el poder de los empresarios y la labor de las comunidades fronterizas, en el desarrollo de la Nación, explicó.

Propone unificar instituciones. Sánchez Roa propuso la unificación de las instituciones y departamentos fronterizos del Estado, de los cuales, criticó, proliferan de forma dispersa.

Dijo que por el gran potencial productivo y vocación turística de la región, requiere que esas instituciones trabajen juntas, pero bajo una estrategia de prioridad, dotación de los estímulos e incentivos existentes en otras regiones y sectores, de manera que la frontera, en vez de ser una carga, aporte más al desarrollo del país, dijo.

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Urge ampliar Ley

Sánchez Roa señaló que urge ampliar y profundizar los incentivos de la Ley 28-01, que crea una Zona Especial de Desarrollo Fronterizo, llamando a las organizaciones empresariales que se oponen a ese estímulo, argumentando una supuesta competencia desleal, a que unan sus esfuerzos.