La Comisión de Seguimiento a los Trabajos de la Junta Central Electoral (JCE) advirtió ayer que la implementación de la Ley de Lemas en estos momentos pondría en peligro la celebración de las próximas elecciones.

Exhortó a los congresistas y a los sectores políticos que la promueven, posponer cualquier modificación a la Ley Electoral para después de los comicios del 16 de mayo de este año.

Monseñor Agripino Núñez Collado, quien preside la comisión, consideró que sólo si se desea que el próximo 16 de mayo no haya elecciones, se podría someter ahora un proyecto que como el de la Ley de Lemas, conllevaría, primero, una discusión en el Congreso Nacional, y luego iría a la Suprema Corte de Justicia.

«Mayo, como dicen los abogados, es una fecha fatal, es una fecha constitucional, tiene que haber elecciones, y yo creo que ustedes, como comunicadores, y la ciudadanía en sentido general, todos tenemos que estar atentos y sentirnos comprometidos conque aquí se preserve la democracia por encima de cualquier cosa, de cualquier capricho», razonó.

El prelado habló en esos términos luego de que el licenciado Radhamés Mejía, secretario de la comisión, diera lectura a un documento en el que el grupo manifestó su rechazo al referido proyecto de ley, por considerarlo «inoportuno y perturbador».

Afirma que pretender cambiar las reglas de juego no sólo perturbaría y dificultaría un certamen electoral tan importante, sino que también vulneraría los derechos adquiridos de parte de los candidatos ya electos por mecanismos internos de sus propios partidos, así como principios y disposiciones constitucionales como el voto directo por candidaturas presidenciales y no por partidos, la razonabilidad y la seguridad jurídica.

«Resulta a todas luces inconcebible que apenas 4 meses (para los comicios) adoptemos una modificación tan trascendental que entrañaría cambios en las boletas, las actas, la transmisión y cómputo electoral, los softwares que se utilizarían en el proceso, el número de delegados de los partidos políticos en los colegios electorales, y se necesitaría de una campaña de educación personal de los colegios y de los votantes», subraya.

Agrega que la nación necesita la seguridad de un proceso electoral diáfano y transparente, «sin complicaciones», como ingrediente indispensable para restaurar la confianza y credibilidad de los dominicanos y dominicanas así como de nuestros socios comerciales.

De acuerdo con la comisión, sólo eso ayudará al país a salir «airosamente» de la difícil situación de crisis económica en que se encuentra.

«Colaboremos con la Junta Central Electoral en su responsabilidad de preparar unas elecciones libres, trasnparentes y creíbles, y con su compriso de realizar las elecciones del 16 demayo sin mayores dificultades», concluyen diciendo los comisionados en su documento entregado a la prensa luego de una reunión que sostuvieron en el recinto Santo Tomás de Aquino de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM).

La Comisión de Seguimiento a los trabajos de la JCE para las elecciones del próximo 16 de Mayo la integran además, los señores Lisandro Macarrulla, rafael Perelló, Marisol Vicens, José Joaquín Puello, Celso Marranzini y el reverendo Reinaldo Franco Aquino.