POR HUGO GUILIANI CURY
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Lo primero era conocer con exactitud el porque República Dominicana no había sido tomada en cuenta por Estados Unidos para un Tratado de Libre Comercio.  Por eso hicimos un diagnóstico que determinó cuales habían sido los hechos que determinaron esa decisión estadounidense.  Realizado esto, pudimos formular la estrategia que sería la primera fase del proceso, la cual fue expresada en los cuatro reportes trimestrales que eran los “Position Papers”, los cuales sirvieron como base para llevar a cabo el trabajo diario durante el año que duró la Fase I. 

Teniendo esto era necesario señalar los principales criterios o argumentos que justificaran el porqué República Dominicana debería ser considerada por Estados Unidos para un TLC.  De los criterios seleccionados en aquel entonces voy a mencionar sólo a cinco de ellos.  Estos fueron:

* La República Dominicana era el país de mayor crecimiento económico del hemisferio en el período 1992-2001 con una tasa promedio de 6.1%. 

* La República Dominicana era el quinto socio comercial de Estados Unidos en el hemisferio.  Nuestro intercambio comercial es de casi diez billones de dólares al año.

* La República Dominicana tiene un impresionante historial en materia democrática y hemos celebrado diez elecciones democráticas cada cuatro años desde el 1966.  En el hemisferio sólo Costa Rica y Colombia nos sobrepasan, el resto de las naciones han tenido durante el período señalado interrupciones en sus procesos democráticos.

* Cuando se habla de gobernabilidad estábamos sobre el promedio en la América Latina.

* La cooperación bilateral en asuntos de narcóticos, derechos humanos, lucha en contra del terrorismo y asuntos de seguridad nacional entre Estados Unidos y República Dominicana ha sido parte importante de nuestras relaciones bilaterales.

Estos argumentos tuvieron un fuerte impacto cuando lo presentábamos y lógicamente nos abrían el camino hacia el logro de nuestros objetivos.  Teníamos entonces que seguir avanzando a través de un accionar que no fuera improvisado, ya que el tiempo era limitado.  Esta fase “estratégica” fue basada en acciones que diariamente se desarrollaban a través de un programa que detallaba  los pasos a dar por la Embajada en un determinado período.  Estos reportes eran los llamados Position Papers que se preparaban trimestralmente y cubrieron desde Sept. 2002 a Sept. 2003.

El contenido de cada uno de esos trabajos fue en esencia lo siguiente:

El primero buscaba destacar que República Dominicana era un aliado clave en la región y la situación que ocurriría si el país se le excluía del CAFTA.  Finalmente en este se examinaron las dificultades que tendría el ALCA para poder convertirse en una realidad.

El segundo tuvo como objetivo demostrar que de ser República Dominicana considerada por Estados Unidos para un TLC, las negociaciones tendrían que ser iniciadas a finales del 2003.  En este position paper se indicaba también las  acciones a realizar para obtener apoyo congresional y del sector privado en Estados Unidos.

El tercer informe tuvo varios objetivos, estos fueron:

* Indicar como se podría hacer un “docking” con CAFTA cin cerrar la posibilidad de un TLC bilateral.

* Preparar la visita del Presidente dominicano a su homólogo norteamericano.

* Tratar de reducir la resistencia que hacía Centroamérica para que República Dominicana no fuese incorporada al CAFTA.

El cuarto y último reporte indicaba las acciones a realizar para tratar de lograr concluir el proceso de la Fase I.

* Fortalecer la posición dominicana con la utilización de argumentos políticos y de seguridad nacional.

* Formar una coalición con grandes empresas norteamericanas radicadas en República Dominicana para que estos apoyasen al país.

* Tratar de obtener que el inicio de las negociaciones fuese en Enero 2004.

* Sostener reuniones claves en las más altas instancias de la administración norteamericana para influir en el Presidente GW Bush y obtener una decisión final.

Casi un año después de estar desarrollando lo que fue la primera fase y que denominamos “Estrategia para lograr que Estados Unidos aceptase otorgar un tratado de libre comercio al país, finalmente ocurrió cuando el Presidente G W Bush notificó a su Congreso en agosto 2003 que negociaría un TLC con República Dominicana.  Quisiera recordar que cuando dimos inicio a esa estrategia en el 2002, pocos creyeron en ella y casi nadie pudo vislumbrar que se estaba en la búsqueda de lo que hoy se admite que es el Tratado más importante que el país ha firmado desde su independencia. Nuevamente percibo que ahora ocurre lo mismo cuando se da inicio a una nueva etapa de apertura de relaciones diplomáticas con el Medio Oriente y el Asia.  En estos momentos pocos ven la importancia que podría tener un paso de esta naturaleza en el futuro de las relaciones externas del país.  Con esto concluyo el segundo ejemplo y pasaré a exponer el tercer y último caso.

 Un Tema de Agenda en Qatar

El país ha establecido relaciones diplomáticas con el Estado de Qatar y a este paso le seguirá la apertura con los Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Bahrein y Arabia Saudita.  En la agenda de Qatar, uno de los temas a realizar dentro de lo que hemos denominado como “Diplomacia Comercial” es el que a continuación presentaré:

Por un lado el Estado de Qatar posee una de las mayores reservas mundiales de gas natural y se ha posicionado para poder suplir el 30% de la demanda mundial de gas líquido (LNG).  Para ello ha construido grandes instalaciones portuarias, plantas de licuefacción, tanques de almacenamiento, gasoductos y una impresionante flota con los barcos de LNG más grandes del mundo.  Esto unido a una política de inversión y concertación de acuerdos con las terminales y plantas generadoras de electricidad en los mercados demandantes de LNG, ha dado como resultado el establecimiento de una eficiente cadena de valor desde el origen al usuario final.  Por el otro lado, es decir en República Dominicana, se poseen instalaciones portuarias, tanque de almacenamiento de LNG con capacidad de 160,000 M3 así como instalaciones de regasificación.  Esto unido a la existencia de potenciales usuarios (generadores eléctricos) que podrían demandar unos 250,000 M2 de LNG al mes, son los factores que podrían hacer viable el lograr acuerdos con Qatar.  El objetivo sería entonces, el tratar de llegar a acuerdos de suministro de LNG y de inversión entre ambas naciones, de lograrse ese objetivo, esto podría llevar a tener que:

*  Ampliar la capacidad actual de almacenamiento de LNG que tenemos en el país.

* Construir un gasoducto de unos 35 Km. desde Andrés hasta la Planta de generación (Cogentrix) en San Pedro de Macorís y convertirla para utilizar LNG.

Pero también es posible mirar más allá del mercado local e ir hacia un proyecto de expansión que busque penetrar al mercado norteamericano.  Esto se podría lograr creando una especie de granja de tanques de LNG y convirtiéndonos en una especie de centro de almacenamiento y de puente para abastecer de LNG al área del golfo y la costa Este norteamericana.  Esto entre otras cosas podría llevar a tener que:

* Realizar una ampliación de las instalaciones que para esto existen en Andrés, Boca Chica o construir en un puerto del norte del país una granja de tanques de LNG con instalaciones portuarias con capacidad para recibir y descargar embarcaciones de hasta 250,000 M3.

* El construir un Gasoducto que conecte con la Florida.

Existen circunstancias tanto en Qatar como aquí, que podrían hacer viable una estrategia de esta naturaleza.  En adición, el LNG podría tener en el país numerosos usos como gas para cocinar, combustible para vehículos y para ser utilizado por los sectores productivos.  Pero no es esta la oportunidad para abundar en esos aspectos.  Igualmente debo indicar que me he limitado al LNG pero también existen con Qatar otras posibilidades de inversión en los hidrocarburos y en otros sectores productivos.

Todo esto lo que significa es que la agenda diplomática dominicana está dando pasos necesarios para alcanzar determinados objetivos de carácter estratégicos en materia comercial.  A medida que la fase diplomática avance es absolutamente necesario que se vayan involucrando en el proceso otras instancias tanto públicas como privadas, tal como ha sucedido con el RD-CAFTA.  En la ocasión anterior, es decir, en Washington, tuve que operar tanto en el aspecto estratégico como en el táctico pero dentro de un ambiente y cultura que conocía.  Ahora en el Golfo Árabe, se presenta un nuevo reto pero en otras condiciones, pues el ambiente y la cultura son diferentes.  Es un reto, pues se dice que el desierto es ideal para el táctico pero un rompecabezas para el estratégico.