Hoy 
Los modos de vivir de los dominicanos que expresan identidad y pertenencia son más armoniosos que las divisiones de 155 municipios que tenemos. El mapa cultural no alcanza para organizar esta media isla en cuatro regiones. Santiago considera la cultura como eje de ciudad; la colocamos como proyecto del Plan Estratégico para promover participación, inclusión, empleo y desarrollo.
Santiago es cuna del pambiche y el pericorripiao; asimismo del son y la bachata. Nuestra artesanía representa lo auténtico de la industria cultural. Con gusto pronunciamos la “i”, así suenan mejor cientos de merengues del mejor verso. La “i” es más agraciada que la “L” de capitaleños y petromacorisanos o la “R” de los sureños. Los bailes folklóricos y el vestir son paradigmas de alegría y la magia del color de las viviendas es cibaeña. Pintores que dibujan la historia y poetas que atrapan desde el primer verso.
El Plan Estratégico (2002) no abordó la cultura. Pasaron 8 años para que una de las comisiones organizadas para elaborar el PES 2020 formada por 35 instituciones, discutiera la pertinencia que Santiago se dotara de una Agenda de Cultura. Esa había sido nuestra tesis de especialización en planificación territorial en CIDEU, Barcelona (2007).
En CIDEU estudié la gestión cultural en ciudades, urbes participantes del Foro de Cultura y la Agenda 21. Santiago estaba ausente, pero había avanzado con el Centro León, el fortalecimiento de Casa de Arte, hogar de artistas alternativos, la 37 por las Tablas”, el Festival de Teatro Escolar, el remozamiento del Gran Teatro y “El Monumento”, el ICA, los Conciertos del Orfeón, el Coro de la Catedral, el Carnaval y más de 200 grupos de animación, proyectan a Santiago como laboratorio social de activismo cultural.
Presentamos al FONPER un proyecto que expone a Santiago repleto de fortalezas y oportunidades culturales. Patrimonios y bienes materiales y espirituales que pueden ser organizados en una dirección. Utilizamos la planificación cultural como herramienta para superar el “eventismo”, y si lo hacemos bien, Santiago, desde las mismas calles, será una innovadora, atractiva y auténtica expresión cultural.
La Agenda Estratégica de Cultura estudia la animación sociocultural; las industrias creativas y el equipamiento urbano. Se formula un diagnóstico participativo y se efectuará un estudio del mercado cultural, que aportará información sobre demanda, oferta y calidad. Transitaremos a una visión, estrategias y proyectos culturales consensuados por todos.
