José Alejandro Vargas Guerrero, taxista y residente en el sector Santa Bárbara, en la zona colonial, se querelló en la Fiscalía del Distrito Nacional por la golpiza que afirma le dió un agente de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), al que acusa de colocarle 33 gramos de cocaína.
Dijo que lo raro es que cuando se le iba a conocer un recurso de habeas corpus, por la irregularidad de su prisión, la Fiscalía lo puso en libertad.
Mostró el certificado del legista, donde figuran los golpes que recibió en el oído y otras partes del cuerpo.