POR INGRIS LEYBA
La presidenta de la Fundación Banco de la Esperanza, Teresa Julio de Santos, ofreció un coctel en el patio español de la Quinta Dominica en honor a Jorge Rojas Zegers, presidente de la Corporación de Ayuda al Niño Quemado (Coaniquen), en reconocimiento a su labor altruista de solidaridad y el respaldo recibido de su entidad para la ayuda, atención y rehabilitación de los niños necesitados de la República Dominicana.

A pesar de la lluvia, se dieron cita al íntimo encuentro un grupo de distinguidas damas miembros de la institución anfitriona, colaboradores del proyecto benéfico e invitados especiales, quienes compartieron animadamente por unos minutos hasta que Teresa Julio de Santos, con la alegría que sólo se refleja en el rostro de quien vive lo que hace, ofreció las palabras de bienvenida.

En su discurso destacó que, gracias a la ayuda incondicional que la fundación de origen chileno ha brindado a la Fundación Banco de la Esperanza, varios niños quemados dominicanos han sido rehabilitados física y psicológicamente.

Manifestó que la entidad que dirige fue creada con el objetivo de dar soporte a niños necesitados en el área que lo requieran, “a esto se debe la diversidad de nuestros proyectos, puesto que nos hemos caracterizado por la unidad y solidaridad con otras fundaciones, abrazadas a la firme convicción de que la unión hace la fuerza”.

 Agradeció la visita al presidente de Coaniquen, cuyo interés por la situación de los niños quemados, ha ido creciendo cada vez más, hasta el punto de traspasar las fronteras de su país, dándole la oportunidad de rehabilitación gratis a pequeños de toda América.

Dijo que después de ver los resultados de Minoska Payano y Julio Ernesto Valenzuela, primeros niños enviados a rehabilitarse en Chile, la directiva de la fundación llegó al acuerdo de que los beneficios debían expandirse a la mayor cantidad de niños enfermos posible, de ahí la necesidad de la firma de un convenio con una mayor cobertura.

Después de su discurso, entregó en compañía de las demás integrantes de la directiva, la paloma de la Fundación Banco de la Esperanza al agasajado, quien agradeció el gesto y el que lo hayan invitado a compartir con un grupo de damas que al igual que él, tienen la visión de ayuda y entrega a quienes lo necesitan.