Productores del Parque Nacional Valle Nuevo denunciaron que la medida de desalojar la agricultura de esa área protegida lo que busca es favorecer a sectores importadores de papa y cebolla.
Se quejaron además de que no se contemple el desalojo de los ricos funcionarios, empresarios y políticos que están en Rancho Guaraguao y que si han afectado el parque.
En visita a HOY, Norberto Rosario, presidente del Bloque de Campesinos de Valle Nuevo junto al productor José del Carmen Martínez, recordó que anteriormente la espina dorsal de Constanza era el ajo y sectores poderosos boicotearon la producción para priorizar las importaciones de ese producto.

Citó que igual pasa con la cebolla y la papa, cultivos que tienen alta productividad en esos terrenos y que ahora se quiere favorecer a un grupo de importadores en detrimento de cientos de agricultores. “Hay manos poderosas para que no se siembre”, expresó Rosario, al indicar que no existe interés de conservar el área.
Con relación a la idea de ponerlos a producir en invernaderos, señalaron que el Estado no tiene recursos ni en Constanza hay terrenos públicos disponibles para esa actividad. Asimismo, indicaron que no conocen ninguna propuesta.
Insistieron que de las 1,447,201 tareas que tiene el parque ellos solo ocupan 9,560.

Negaron que hayan destruido el parque y por el contrario han reforestado 1,800 tareas en acuerdo con las autoridades del Ministerio de Medio Ambiente.

Indicaron que no pueden asumir la responsabilidad de daños ocurridos en el parque en territorios de las provincias San José de Ocoa, Monseñor Nouel y Azua, donde aseguraron los productores no han sido molestados y solo los de Constanza, pese a que han preservado. “O somos todos o ninguno”, dijo Rosario.

También denunciaron que los militares apostados en el parque han estado rompiendo casitas, mangueras y cerrando acceso algunas comunidades, así como maltratando a los obreros haitianos.
Comisión. Sobre la comisión que está mediando en la búsqueda de salidas a la crisis, los agricultores mostraron su preocupación porque a cinco días de vencer el plazo dado por Medio Ambiente, no tienen nada concreto mientras la incertidumbre se apodera de la gente

“No es verdad que vamos abandonar el área sin una solución adecuada para nosotros seguir subsistiendo”, expresó Rosario.

Los productores aseguraron que la agricultura y la conservación del parque pueden convivir, pero que no pueden dejar el área protegida sin alternativas.
En un espacio pagado, los productores pidieron oportunidad de ser escuchados.