Mercados-ADN

Con la entrega de los mercados minoristas de Villa Consuelo, Cristo Rey y Villas Agrícolas al Ayuntamiento del Distrito Nacional (ADN), tras un acuerdo con el Ministerio de Agricultura que no se ha concretado, se distorsionará el funcionamiento de la Red Nacional Alimentaria (Rena) y del ente estatal Mercados Dominicanos de Abasto Agropecuario (Mercadom), creados por la Ley 108-13. La red de mercados de España, de la que forman parte los ayuntamientos, está funcionando bien desde hace años, con una ley similar a la de aquí. Pero ocurre que el alcalde Roberto Salcedo logró convencer al presidente Danilo Medina de que ordenara la entrega de esos mercados a su cabildo, a pesar de que fueron construidos por el Gobierno con préstamos en dólares. Es bueno recordar que si el Ayuntamiento del Distrito Nacional no ha sido capaz de recoger la basura con eficiencia, mucho menos va a poder manejar estos mercados con la eficiencia que demanda el momento. Basta dar una ojeada a la pocilga de Mercado Nuevo de la avenida Duarte. Hay que recordar que entre estos mercados minoristas y el Merca Santo Domingo (de mayoristas) debe haber una comunicación directa. Los minoristas están sujetos a abastecerse del Merca de productos agrícolas limpios y de calidad. Si las autoridades quieren que los mercados minoristas funcionen bien para beneficio de productores, consumidores y comerciantes, están a tiempo de dejar que se aplique la Ley 108-13.

Enlatados

Los supermercados, principalmente los grandes, están llenos de productos enlatados con las etiquetas en inglés y otros idiomas. No tienen traducciones al español, como ocurre en algunos casos. Para que se ajusten a las reglas y a la ley, es bueno que representantes de Pro Consumidor visiten estos establecimientos de venta de alimentos y otros. Con ese comportamiento están engañando a los consumidores que adquieren estos productos sin saber lo que están comprando. Además, en sus góndolas hay productos de todo tipo con las fechas de consumo vencidas, lo que puede representar peligro para quienes los consuman.