La Asociación Dominicana de Hacendados y Agricultores, propuso ayer al gobierno ejecutar una política de crédito que garantice financiamiento preferencial al sector agropecuario por RD$20 mil millones adicionales al año.

Aclaró que el financiamiento de esos recursos  sería a través de la canalización de los capitales de la banca comercial de una manera preferencial, y de la creación de un Fondo Especial para el Financiamiento de la Agropecuaria, así como la instalación de un sistema de garantías agropecuarias.

Afirmó que el principal problema que afronta ese sector es  de financiamiento, porque a pesar de que aporta alrededor de un 10% del PIB, sólo recibe un 5% de la cartera de crédito, lo que significa que sigue siendo subfinanciado.

La entidad resaltó en un documento entregado al director de HOY, Bienvenido Alvarez Vega,  que esas propuestas fueron consensuadas con otros sectores durante el desarrollo de la “Cumbre por la Unidad nacional ante la Crisis Económica Mundial”, auspiciada por el gobierno.

Otras propuestas.  Refiere  que sería pertinente poner en ejecución, a través de las instituciones públicas un “Plan Nacional de Reconversión y Mejora Productiva del Sector Agropecuario Dominicano”, a cinco años, que incluya mejorar las especies y genéticas, el manejo y la calidad, capacitación de personal, fomento del uso de la tecnología.

Igualmente, que ese plan incluya mejorar la asociatividad del sector, promover el acceso y manejo de la información de mercado, realizar un esfuerzo por la reducción general de costos, priorizar la comercialización, la asistencia técnica permanente, la infraestructura y promover la tecnificación.

Césareo Contreras, presidente de la Asociación, quien firma el documento, resaltó que con el objetivo de promover el desarrollo nacional, pide que las compras gubernamentales se conviertan en un instrumento de promoción de la producción, por lo que señala se debe ordenar, vía decreto, la priorización de los productos de manufactura local en las compras gubernamentales.

Solo la garantía de la soberanía alimentaría, señaló, permite al Estado reducir los impactos negativos de la inestabilidad en los mercados internacionales.

Dijo que un sector agropecuario desarrollado y  sólido “funciona como un colchón que amortigua los efectos de un encarecimiento de  productos alimentarios a nivel internacional.

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Productividad

Explicó que otro de los problemas son los altos costos de producción, tras proponer una política de exención fiscal que los libere  de las cargas  fiscales, así como  eliminar  el impuesto al gasoil para la agropecuaria y reducir el precio de la tarifa eléctrica.