Hoy 
El productor de leche tiene que dar un cambio en la forma de visualizar su finca para planificarla y convertirla en una actividad rentable, que pueda competir con Estados Unidos y el resto de Centroamérica dentro del DR-Cafta, ya que faltan 17 años de protección.
A partir de 2027, todos los lácteos pueden entrar al país libres de arancel. Asimismo, el productor tiene que tener conciencia de que sus problemas empresariales tienen que resolverlos individualmente o en grupos, los gobiernos ayudan en todos los países en vías de desarrollo, pero el fomento de la producción de leche, el procesamiento y comercialización, lo han resuelto a través de cooperativas.
En Estados Unidos más del 80% de la leche depende de cooperativas, en Costa Rica más del 95%, en Colombia más del 85%, en Uruguay casi la totalidad y así en diferentes países de América, sin irnos a Europa.
Los ganaderos tienen que romper en el 2010 con ese individualismo y tener fe entre ellos y formar cooperativas, aunque hasta el presente la mayoría de las mismas han sido un fracaso. Sin embargo, la experiencia nos indica que de los problemas y los fracasos viene la luz y nunca es tarde para comenzar de nuevo.
En ese sentido, voy a sugerir varias ideas para que las diferentes asociaciones, federaciones y APROLECHE, hagan reuniones con grupos reducidos buscando opciones y una vez que se tiene una idea mejor terminada, convocar a una asamblea para dialogar sobre los aspectos siguientes:
1. Inventario de ganado. En 1998 existían 9074 fincas sobre 10 animales en cada finca, conocidas como comerciales. Había unas 59,582 microfincas para el autoconsumo, con menos de 9 animales por predio.
La superficie ocupada era 19 millones de tareas, de las cuales el 51% estaban cultivadas de pastos mejorados y el 49% de pastos naturales, con una infraestructura en cada finca muy precaria, lo cual se puede comprobar en el volumen II del Censo Pecuario.
Esto fue comprobado por los profesionales de Israel en el Programa MEGALECHE, que ejecuta la Dirección General de Ganadería.
En el 2010, se estima que un inventario por fincas comerciales de 8,000 explotaciones.
El 77 por ciento de estas fincas se dedica a la ganadería de doble propósito (leche y carne); el 20% a la crianza de animales para carne y el 3% restante, especializadas en leche.
De las 8,000 fincas comerciales, el 75 por ciento son pequeñas, el 22 por cieno medianas y el 3% grandes.
Igualmente, según el concepto de varios especialistas en ganadería, fincas pequeñas tienen de 10 a 30 animales y producen el 15% de la leche; fincas medianas, disponen de 31 a 100 animales y producen el 55% de la leche y fincas grandes sobre 101 cabezas, generando el 30 por ciento.
