Hay que defender nuestra patria. El Gobierno norteamericano se ha vuelto en contra de República Dominicana; de ahí que Jimmy Carter  declaró que a RD le será imposible detener en la frontera a los haitianos. 

Pasan la frontera porque no ha existido voluntad política de nuestros presidentes de instruir a las FFAA, que deben sellar la frontera y solamente permitir el tránsito de las personas legales.  Aunque nunca me gustaron los gobiernos de Balaguer y  Trujillo, tengo que reconocer, mantuvieron posiciones dignas de nacionalidad. 

Ahora la administración Fernández se ha descuidado tanto, que ya hay poblados enteros de haitianos que viven del lado dominicano.

Las tierras que compran los dominicanos cerca de la frontera, el derecho de ocupación hay que adquirirlo de los haitianos.  Nuestras fuerzas armadas han fallado como el guardián de la frontera y se han doblegado a los intereses políticos y económicos, permitiendo por la frontera pasen drogas, armas, mercado de  haitianos, chinos, cubanos, etc.  Nuestro Congreso Nacional es corrupto, porque un cónsul que daba visas para este tráfico de gentes, todavía lo aceptan como diputado. 

Sin embargo, EEUU en su frontera con México está construyendo un muro para impedir que los espalda mojada pasen a trabajar a tierra norteamericana, y eso que México tiene derecho a reclamar a California, Nuevo México, Arizona, Texas y parte de Colorado, que EEUU se los quitó a base de la ametralladora y luego en 1840, le hizo firmar un Tratado, quedándose ellos con todas esas tierras.

El profesor de Harvad Samuel P. Huntington, quien escribió el libro El choque de civilizaciones, teme que México reclame sus tierras a las cuales tiene derecho.

Es preocupante, pero mi país cada día se haitianiza más, porque nuestros gobernantes han permitido que la población haitiana invada año tras año nuestro territorio, donde varias ONG, financiadas por EEUU, Francia y Canadá, se encargan de traer haitianas a parir en nuestros hospitales, con el objetivo macabro, que algún día tengan derecho a pedir la nacionalidad dominicana. 

De acuerdo a una jurisprudencia de la Suprema Corte vigente en el 2009, todo extranjero que nazca ilegalmente en el país, no es dominicano.  Nuestros dirigentes, Dr. Leonel Fernández, presidente del PLD, e Ing. Miguel Vargas Maldonado, presidente del PRD, firmaron un acuerdo político, donde los diputados y senadores de ambos partidos se comprometían a aprobar en la Asamblea Revisora, que en la Constitución de 2009 se aprobaran algunos artículos, entre ellos el de “jus solis” y “jus sanguinis”, para dar la nacionalidad dominicana.  Aunque no soy experto en derecho constitucional, me parece que este artículo es un “arroz con mango”.