El criterio que recoge el título de estas ideas corresponde a palabras expresadas el miércoles por Julio Brache, presidente de la Asociación de Industriales de la República Dominicana (AIRD) durante el encuentro del liderazgo empresarial nacional con el Grupo de Comunicaciones Corripio.
Celso Juan Marranzini, vicepresidente ejecutivo del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP), precisó en el encuentro que el posible acuerdo debe estar orientado a promover empleos, inversión y bienestar social, poniendo la educación como punto principal, ya que “de esta depende la estabilidad y el crecimiento económico de un país.
“Este es el momento para ver todos los temas pendientes y mejorarlos con acciones concretas dentro de un marco donde el liderazgo político debe asumir su responsabilidad y enfocarse en las prioridades que tiene el país.
“Hay que verlo como un pacto para que podamos tomar las medidas necesarias para que el país siga avanzando en los próximos 20 ó 30 años”, explicó.
En el encuentro estuvo presente también Laura Peña Izquierdo, presidenta de la Confederación Patronal de la República Dominicana (Copardom), en señal de la coincidencia que tienen los empresarios en la responsabilidad social que tienen con el país ante la disyuntiva de avanzar o seguir acumulando rezagos estructurales.
Los empresarios citan que la crucialidad de las reformas se debe al aprovechamiento de la sintonía entre ellos y el gobierno, dados los buenos resultados de la sintonía público-privada para superar la pandemia y avanzar, como hemos avanzado de manera ejemplar ante los ojos del mundo, en la resiliencia mostrada durante la pandemia sanitaria, y la recuperación de la economía en los últimos 4 años.
Hay otra razón fundamental para emprender ahora esas reformas: un gobierno que acaba de recibir un endoso mayoritario del electorado en las elecciones municipales, legislativas y presidenciales, vale decir que la propuesta de profundizar las reformas con que Luis Abinader se presentó en esos comicios está respaldada abrumadoramente por el pueblo.
Aunque el presidente ha reiterado su coherencia en llamar a la concertación con la oposición. es obvio que no es lo mismo un gobierno de minoría o de precaria mayoría, que una gestión que cuenta con el endoso del pueblo.
Sobra decir que la reforma es pertinente, justa y necesaria ahora, por el colapso en que Luis encontró todos los servicios públicos, y los grandes déficits de las finanzas públicas que venimos arrastrando desde 2012.
Es una feliz coincidencia que los empresarios estén de acuerdo con el Pacto de Nación, como lo llaman ellos, o la Visión 2036 como la denomina Luis, de trabajar para duplicar el PIB en los próximos 12 años.
¡Ahora o nunca!