POR MARIO MENDEZ
El arquitecto Alejandro Montás reveló que, tras el descenso del tipo de cambio, quienes venden viviendas están pidiendo que el pago se le haga en pesos.

Explicó que la situación se ha revertido con relación a unos meses atrás, cuando el tipo de cambio estaba en ascenso y los vendedores de viviendas cotizaban las unidades en dólares.

En una entrevista concedida al editor económico de Hoy, Montás también planteó la necesidad de que se integre a la comunidad a la ejecución de un plan maestro de desarrollo de la ciudad de Santo Domingo, para mejorar el nivel de vida de la población.

Montás, diputado y ex-presidente del Colegio Dominicano de Arquitectos, Ingenieros y Agrimensores (CODIA), también informó sobre los planes de terminar importantes obras viales pendientes de terminación en diferentes puntos del país.

A continuación se ofrece el texto de la entrevista:

– ¿Cuáles son obras más importantes que están pendientes de conclusión en el país?

– Yo me iría por las obras viables, que son las que tienen mayor impacto económico.

Las más importantes son:

La red de desarrollo viable de la carretera Santo Domingo-Cruce de Molinillo-Samaná, con una inversión de unos 120 millones de dólares y que fue concesionada por una firma colombiana-dominicana y que está siendo financiada por el Banco del Exterior de Colombia.

Ha sido iniciada. Tiene aproximadamente 10 kilómetros, sobre todo se ha trabajado en la base y parte de la sub-base de la carretera.

Estuvo unos once meses paralizadas y dada la importancia que tiene ese obra para el desarrollo turístico en Samaná, se está planteando conectarla con un préstamo del Banco Mundial de 100 millones de dólares, para iniciar la construcción del aeropuerto del Catey.

Conectando esas dos obras, el desarrollo de Samaná será pronto una realidad.

Otra obra que consideramos de suma importancia es el corredor del Este.

Para la construcción de la Autovía del Coral, que completaría el corredor, hace falta una inversión de 255 millones de dólares. Esta obra tiene que ser financiada por Notas de Infraestructura, que fueron aprobadas ya por el Congreso Nacional, y se está esperando que el país se estabilice para colocar esos bonos.

Conjuntamente con esa obra, se plantea construir el corredor turístico interno, que es una obra de 37 kilómetros, con una inversión de alrededor de 30 millones de dólares. El presidente de la República comunicó hace poco en una reunión con hoteleros, su disposición de construir esa obra, financiada totalmente por el gobierno central. Probablemente en este mismo mes se dará el primer picazo de esa obra, que va a planificar, ordenar y desarrollar toda la infraestructura turística en el Este.

También está la ampliación y reconstrucción de la carretera San Cristóbal-Baní.

Esta obra está paralizada porque, como nosotros habíamos denunciada, la ley fue violada porque había sido concesionada, pero el gobierno anterior la entregó de grado a grado a una prestigiosa compañía dominicana, a pesar hay una ley que le da la concesión de la obra a otro consorcio.

Esa parte habrá que aborda y verse como se va a manejar esa situación.

Yo creo que hay que buscarle una solución a ese problema.

Otra obra sumamente importante es el proyecto para el diseño y construcción de unas 3,500 habitaciones hoteleras para el desarrollo del turismo en la región Sur.

-¿Qué políticas usted cree que deben ponerse en marcha para enfrentar el problema del déficit de viviendas?

-En el 1999 el crecimiento de la industria de construcción alcanzó el 18 por ciento. Lidereó todos los sectores.

Pero en los últimos años la industria de la construcción ha sufrido una paralización lamentable, lo cual ha provocado pérdidas de empleo.

Todos los actores que inciden en la industria, preocupados por esa situación, han planteado como primera solución unirse, y se ha constituido la Gran Mesa de la Vivienda.

Se busca el apoyo de todos los actores que inciden en el sector, comenzando con la Suprema Corte de Justicia.

También se ha acudido al Congreso Nacional, porque se necesita una ley de la vivienda, que incluya la creación de la Secretaría de Estado de la Vivienda, Asentamientos Humanos y Edificaciones, para que encargue de todo lo que se vaya a tratar con relación a planificación y construcción de viviendas y asentamientos humanos.

En la labor que está llevando a cabo para integrar a todos los sectores que inciden en la vivienda participan la Asociación de Promotores y Construcciones de Viviendas, el Colegio Dominicano de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores, la Cámara Dominicana de la Construcción, la Asociación de Ferreteros, la Asociación e Productores de Cemento, la Asociación de Productores de Agregados, Productores de Blocks de Hormigón, la Asociación de Empresas Inmobiliarias, la Asociación de Ahorros y Préstamos y bancos hipotecarios.

Unos de los problemas que ha afectado mucho a la construcción son los costos. La vivienda se dolarizó con el aumento de la tasa de cambio, y esto trajo consigo un incremento de costos.

Además, el sector fue afectado por la falta de credibilidad en las políticas que se venían aplicando.

Con el cambio de gobierno, se ha recuperado confianza, se ha estabilizado el dólar, y han bajado la tasas de interés y los materiales de construcción.

No obstante, los precios de las viviendas se mantienen altos, al igual que los de mucho alimentos.

Los que se mantienen bajos son los precios que se han cotizado en dólares.

Cuando subió la tasa de cambio, vendían en dólares, pero ahora que ha bajado, están pidiendo que les paguen en pesos, como producto del fortalecimiento de la moneda dominicana.

-¿Cómo usted cree que se puede enfrentar el problema de los costos en el sector construcción?

-Esto siempre ha sido una preocupación.

Nosotros sostuvimos recientemente una gran reunión con los sectores importadores.

La Cooperativa de los Ferreteros se está poniendo a disposición de los constructores, para que consigan precios vía volúmenes.

Se debe también mantener la importación abierta, sin discriminación.

-¿Está fluyendo el financiamiento al sector construcción?

-El empresario Diego de Moya Canaán, de la Cámara Dominicana de la Construcción, expresó recientemente una preocupación con la cual estamos totalmente de acuerdo. Los bancos han depositado en certificados en el Banco Central todos los recursos que debieran estar disponibles para financiar a los sectores productivos del país.

Eso ha paralizado el desarrollo económico.

Pedimos a las autoridades y a la Junta Monetaria que revisen en esa situación, porque no debemos permitir que se paralicen las inversiones.

-La presidenta del Consejo Nacional de la Empresa Privada, Elena Viyella de Paliza, acaba de plantear que debe haber un plan maestro de desarrollo urbano, y que las inversiones públicas deben estar priorizadas en función de ese plan.

¿Qué usted piensa sobre este particular?

-Nosotros nos identificamos totalmente con esa preocupación.

Creemos que una ciudad segura.

Se están tomando las medidas de lugar en esa dirección.

También nos identificamos con una ciudad mejor administrada.

Por eso pedimos una ciudad planificada, sobre todo con una base de desarrollo sostenida.

Hay que hacer un gran plan director.

Las diferentes administraciones de la ciudad siempre han hecho grandes planes, pero nunca los han ejecutado.

Por ejemplo, el gran plan director de la ciudad de Santo Domingo establece que se necesita una ciudad transitable, con mayores ofertas de soluciones para desarrabalizar el tránsito.

El gobierno ha decidido plantear al país la solución del Metro de Santo Domingo.

La ciudad tiene un atraso de más de 40 años en cuanto a su desarrollo vial, y en el transporte hay un gran desorden.

Con el planteamiento de construir el Metro, hay que hacer una gran ley de vialidad y transporte, para ordenar el tránsito en la ciudad de Santo.

Sin esto, el proyecto no funciona.

El tránsito debe ser organizado con plataformas de tránsito.

Las estaciones de transferencia del transporte interurbano. Hay que planificar donde llega el Norte, el Sur y el Este, y planificar las estaciones de transferencia.

La iniciativa del tren debe ser aprovechada para hacer un gran plan estratégico que contribuya a mejorar la calidad de vida en la ciudad de Santo Domingo.

Las administraciones de la ciudad se han limitado su gestión a la recogida de basura, y han desdeñado el objetivo de mejorar la calidad de vida, que debe ser lo principal.